Nuevo amor, nuevos dolores de cabeza priv-Kunsel

- sí que lo es, simplemente, maravilloso. - digo totalmente relajado escuchando el latido de su corazón.


Le escucho hablar sobre su trabajo. - que bueno, Kunsel. Por cierto... deberías agradecerle a esa chica... me dio un empujón. - sonrío sintiendo esa gran mano cálida en mis cabellos. Acaricio su pecho mientras respondo a ese beso ardiente. - kimochi. Más. - tomo su rostro y le vuelvo a besar con ganas. Le sonrío y apago las luces. - vamos a dormir que es tarde.

te puedo demandar por tortura... - dice divertido ante aquello que le bese de esa manera y después le diga que deben dormir, sin embargo es bastante divertido y se duerme a su lado, por primera vez en muchos meses, no puede despertar antes de Ethan - cuanto tiempo dormiste? - pregunta al verle observarle - me estás espiando? prometo no volver a irme - le atrae para besarle con profundidad

- No quiero ir a la universidad.... - balbucea como niño pequeño

- hazlo. - le digo divertido acurrucándome contra él y me duermo enseguida, mis pesadillas disminuyen mágicamente con él.

Me despierto a la mañana siguiente y le veo dormidito. Beso su cicatriz como si pudiera devolverle su aspecto y esto fuera un cuento. Suspiro y la acaricio despacio y luego me le quedo mirando esperando a que suene el despertador, pero mi amante despierta dos minutos antes de eso. Le sonrío cuando dice que no se escapará y ese beso se siente más intenso por como hace despertar mis sentidos dormidos aún. Me lamo los labios después de eso fascinado de lo bien que besa mi amante


- Niño mimado. - froto mi nariz contra su pecho y me levanto frotándome los ojitos. - puedes tomarte tiempo apra levantarte, haré hot cakes para desayunar, los quieres con mantequilla? - me pongo mis pantuflas y me levanto tomando a los gatitos que se están desperezando en la cama para darles de comer y dejarlos en un sitio donde no rompan nada antes de irnos. Son tan lindos pienso mientras me los llevo y le guiño un ojo a mi amante desde la puerta.

- No lo soy - hace un moín tierno aunque a él no se le dan mucho, sin embargo se queda un par de minutos en la cama levantándose para alcanzar a Ethan en la cocina

- Buenos días... niños... - dice divertido - uno es principito verdad?... y el otro Dolce?... - acaricia el pelillo de ambos aunque le rehuyen un poco al principio al no conocerlo - son lindos - se levanta - oye te ayudo con eso? - se lava las manos para ayudarle a poner la mesa y preparar lo que faltaba

- Elena quiere que vaya a ver a un cirujano plástico... tu que opinas? - pregunta curioso, tal vez podrían ayudarle a disminuir la cicatriz o algo así

- así es. - digo contento cuando recuerda el nombre de los gatitos que ahora tienen los hociquitos manchados de leche. - jaja, lo son, los más lindos. - saco los hot cakes de la tostadora y frío un poco de mantequilla. - Pues... si no te improta partir los plátanos y las fresas.

- Yo creo que deberías ir. - le abrazo por la cintura con cuidado de que no se corte. - Mis besos no funcionan contra el maleficio, ya que sigues siendo un príncipe. - digo divertido y beso su cuello con cariño.


- pero me preocupa más tu pierna, en casa no pasa nada porque no te mueves mucho, pero me gustaría que usaras la muleta fuera, así no te vas a recuperar. - sirvo las cosas, pero le miro serio.

Supira al escuchar lo de la muleta.

- Lo sé... - dice serio también - pero... es... exasperante... - aprieta el cuchillo, realmente estar así era sumamente odioso, le molestaba más que dolerle, de cierta manera se sentía inútil y no quería parecer más liciado de lo que estaba, estaba consciente que era un pensamiento tonto pues si no se cuidaba no se recuperaría del todo, estaba siendo un caprichoso - la... la llevaré hoy... - comenta a regañadientes comiendo un poco de plátano...


8me voy, espero verte ahora si en la tarde ;_;)

- No es tan malo, cuando una persona se lesiona una pierna tiene que evitar apoyar peso, que no lleves una escayola no significa que no debas hacerlo. - tomo la mano que aprieta el cuchillo haciendo que afloje. - Gracias. Yo no quiero que te conviertas en un minusválido como yo. - apoyo la mejilla en su omoplato. - Yo sé bien lo que es sentirse inútil y dependiente. - tomo su brazo haciendo que gire hacia mí. - por eso, si queremos evitarlo hay que tomar algunas precauciones, ne? - le abrazo antes de decirle que nos sentemos. - Ya verás, te recompensaré con un poco de tortura en la noche - digo divertido partiendo mis hotcakes.

Se gira para abrazarle

- Gracias Ethan... - besa su frente y se sienta a desayunar, había escuchado lo de la noche aunque ahora que lo meditaba bien, no sabe si será capaz. su pierna, la cicatriz de su rostro... las cicatrices en su cuerpo habían aumentado también.

- Pasaré a la cafeteria a ver a Zack... saliendo de la escuela - le sonrie

- seguro me regañará, me dijo que no fuera hasta que me sintiera muy bien, aunque no he estado con ellos estos meses me siguieron depositando mi parte... ese sujeto... es un tonto - balbucea sonriendo

- Te acercaré a la cafetería y te esperaré tomando algo. No te fuerces trabajando, si?- en verdad parece que no quiero despegarme de él en absoluto.

- Tienes un gran amigo. - me como un hotcakes. - me encantan estas cosas digo huntándolo en mantequilla y nata Cojo una cereza y se la doy a mi amante con mi mano y sonrío feliz al hacerlo. Termino de comer y cojo a Dolce en brazos que también terminó su parte y está correteando entre las sillas y le dejo que lama mi tenedor. - rico, eh? - doy un besito entre esas orejas puntiagudas y me lo subo al hombro andando para recoger las cosas. abrazo a mi amante cuando se levanta. - preparémonos. - inhalo su aroma, sigue siendo tan penetrante en la nariz como siempre. - te amo.

(me siento chinche o o... comida familiar .-. ò_ó mañana especial Kunselx Ethan¡)


Ladea la cabeza.

-Acabaré teniendo celos del gato... - dice sonriendo y le ayuda a ordenar todo, estaba bastante tranquilo realmente - bueno...no te preocupes si?... es decir regresaré en la noche - no es que no quisiera estar cerca de Ethan pero tenía que volver a acostumbrarse a algunas cosas

Esperaba que el mayor no lo tomara a mal, pero se quedaría hasta algo tarde pues quería platicar de varias cosas con Zack, no tenía mucho de haber regresado y había mucho que contarse

- oh, está bien. - digo tranquilo, pero por algún motivo, me siento algo decepcionado. - te llevaré en coche de todas formas, sí? te dejo y me voy. - le aseguro, no queriendo ser una molestia.

- Voy a guardar a estos dos, dúchate, que al final no llegamos. - digo divertido con Dolce en el hombro y Principito andando a mi lado de forma elegante con su coliga hacia arriba como si saludara.


Le llevo a la universidad, detengo el coche un poco antes y le miro coqueto. - Dame un beso, guapetón. - le beso con ganas acariciando sus cabellos y acaricio su cicatriz. - debería de aprender a maquillártela, vendrías a un centtro de cosmética conmigo? así te podrían elegir el tono adecuado del maquillaje y enseñarme a hacerlo.ah y a cenar, vendrás a cenar? - arranco el coche y le dejo a la puerta para ir a los estacionamientos para trabajadores del centro.

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Jajajaja ok ok - le da un beso de manera muy profunda sintiendo las ganas del otro, acaricia su cuello.

- Está bien... le diré a Elena que te enseñe, aunque parece muy ruda es muy buena persona, ok? claro que iré a cenar... - le mira con atención - te debo una semana... recuerdas? - antes de irse habían quedado en pasar una semana juntos, nunca creyó que eso fuese posible después de casi un año. - se baja tomando la muleta, no le gustaba pero... suspira comenzando a caminar con ella, al menos asi la cojera o los efectos de ella sobre los demás disminuían pues pasaba a ser un estado a una herida y la gente cambiaba demasiado con ello, sin saber porqué realmente.

las clases fueron rápidas, al menos eso le pareció, aunque no pudo ver a Ethan pues había estado con Reno que lo traía de aquí para alla mostrandole las novedades del campus. Y lo no nuevo también.

- Siento llegar tarde - dice al llegar al coche de Ethan - esto... es incómodo - dice dejando la muleta en el asiento trasero

- sí, lo recuerdo. - sonrío contento de que retomemos las cosas justo por donde las dejamos.



- No pasa nada. - le aseguro cuando se sube al coche. Suspiro y acaricio su pierna de forma consoladora. - Hazlo por mí, sí? - le sonrío. - qué tal el día? - digo conduciendo de camino al café cosplay. - vas a seguir asistiendo al final o lo harás no presencial?

- Creo que intentaré venir lo más que pueda, aunque a veces esos sujetos me fastidian sobremanera - asegura sintiendo la caricia en su pierna - veremos que sucede... - le sonrie - si vamos al café, hoy dicen que hay cosplay de un anime musical... aunque no se...Nodame...algo, dijo Zack - se encoge de hombros - me parec eincreible... que sea.. padre... madre?... jajaja... en fin, supongo que quiere contarme sobre el mako , como fue tu día?

- Intenta aguantar, sabes que es mejor venir a las clases que tener que estudiar por tu cuenta. - sonrío al verle hacerlo. - jajaja, cada vez que recuerdo la cara que se te quedó cuando te dije que estaba embarazado. - digo riendo melodiosamente. - aunque no era para menos.


- Mi día normal, sin novedades. está mañana no te hice bento, pero lo haré a partir de ahora y en vez de quedarte una semana... me gustaría que fuera hasta que tu pierna se recuperara del todo. - le sonrío. - creo que si no estoy pendiente de mí no te cuidarás.

- tampoco soy un niño.. - dice con algo de rudeza aunque despues se disculpa - lo siento Ethan... a veces... es como si ... no quise hablarte así - dice arrepentido, sehabía vuelto algo rudo mientras estuvo en la guerra, no quería ser así con Ethan pero a veces parecía, o mejor dicho, actuaba sin pensar

- Gracias por querer cuidar de mi... -se miraba realmente mal por haberle contestado de esa manera

Me sorprende su forma de contestarme. - oh, gomen. - digo sin saber que decir y sin entender que le molestó para hablarme así, solo quiero que deje de sufrir y que se recupere.

Escucho sus disculpas cuando llegamos a la cafetería. - No importa, no debería de meterme así en tu vida. Gomene. - digo algo desilusionado, pero le sonrío a medias, supongo que de nuevo estamos yendo muy deprisa.

- Ethan... yo... - suspira y abra la puerta - nos veremos en casa...si?... lo... siento - toma la muleta entrando a la cafetería, recien llega los chicos le reciben bastante bien, Elena se asoma por la ventana y saluda al rubio como si no hubiese pasado nada entre ellos y le conociera de toda la vida, despues vuelve a entrar.

Estuvo platicando con Zack mucho tiempo incluso después de cerrar, habían ido a casa del pelinegro pues no podian andar con el bebé tan tarde en la calle. El pelinegro le dijo que debía cuidar su temperamento y que todo iría bien, que aprenderían a entenderse como Hatori y él.

Eran las tres de la mañana cuando llegó a casa de Ethan, le había pedido que no fuese por el que Zack le llevaría, y a Zack le dijo otra cosa, que Ethan le vería saliendo del departamento, sin embargo se había ido caminando con las muletas hasta la casa del rubio, intentando despejar su mente, entra con cuidado para no hacer ruido

Asiento y ni siquiera nos damos un beso para despedirnos. Suspiro haciendo andar al coche. "No importa, es una discusión pequeña, ni siquiera es una discusión" me digo a mi mismo.

Tras seguir corrigiendo algunos ejercicios hago la cena para los dos, pero cuando le llamo me dice que llegará tarde, así que ceno acompañado de los dos felinos los cuales se duermen mientras leo un libro en la cama, como a las doce no ha llegado apago la luz. Dejé la puerta abierta, por si viene Kunsel, pero supongo que ya irá a su casa. No le espero más y me acuesto, pienso en llamarle cuando tardo en dormirme, pero recordando lo del coche decido no sobreprotegerle, si estoy llamándole todo el rato solo parecerá que soy su padre o quiero encelarle. Poco después consigo quedarme dormido sin o irle llegar.

Todo está oscuro, cierra la puerta cuidadosamente, Zack tenía razón debía dejar de comportarse así con Ethan, lo pasado así quedaba. Sube las escaleras con cuidado, odiaba esas muletas, odiaba su pierna... en cierto sentido se odiaba así mismo por ahber terminado así.

Lentamente abre la puerta de la habitación, mira al rubio dormir, se queda sentado a su lado observándole, se veía tan hermoso.

- Te quiero - susurra bajito y se levanta para cambiarse

Sigo durmiendo cuando se sienta a mi lado y cuando me habla, pero mis ojos se abren cuando se está cambiando dándome la espalda, la luz de fuera me deja ver claramente un pedazo de la piel de esta, mis ojos se van a una cicatriz nueva en ella. Me levanto solo haciendo crujir un muelle de la cama y le abrazo por la espalda adormilado. - también te amo. - le digo, aunque no recuerdo que él me lo haya dicho, mi subconsciente sí y ha condicionado mis palabras. Le aprieto con fuerza con la mejilla presionada contra su espalda. - te amo, mucho.

Le sorprende verle despierto.

- Ethan... -se voltea para abrazarle mirando lo adormilado que está, sonrie de lado al verle semidormido, tan lindo realmente - perdoname por todo si? - besa sus labios con calidez, le fascinaba tenerle así a su lado, de esa manera tan bella - te quiero Ethan - vuelve a besarle

- Mañana no quiero ir a la escuela - dice besando su frente

le veo una gran sonrisa y le palmeo el hombro. - no te rías porque me vea dormido. - me rio un poco y asiento. - No pasa nada, me tomo las cosas demasiado enserio. Estás perdonado, siento estar encima de ti, pero no puedo evitar preocuparme. mm... - sus labios se apoyan en los míos sin que apenas los vea acercarse, acaricio sus cabellos mientras le respondo tranquilamente. Me rio apoyándome en su hombro mientras me tiene abrazado y después de ese beso en la frente. - Dirás mañana tampoco quieres ir. Siempre igual. - digo sin regaño, ya que es un halago hacia mí.

- Bueno... entonces no vayamos, reportate enfermo... y nos quedamos todo el día en la cama... - le besa el cuello con suavidad

- Sabes bien, me agrada el aroma de tu piel, la suavidad ... te adoro por completo en todas las formas posibles - le iba a llevar a la cama cuando de pronto ese modo de caminar, suspira recordando también su cicatriz - anda , a dormir o si no en verdad que nos quedaremos sin clase - sonrie intentando verse feliz y termina de cambiarse

Suspiro feliz cuando besa mi cuello, sé que no debería de faltar a clase, pero hace tanto que no le toco. Me dejo arrastrar a la cama, pero se detiene, cuando habla y veo como me sonríe me doy cuenta de como se siente y me dan ganas de llorar, es mi culpa pienso abatido.

- Kunsel... - le sonrío acariciando su pecho. - Yo... te sigo deseando. - le miro con sinceridad, aunque su cojera persista y su cicatriz siga deformando su rostro, le sigo queriendo con todo mi corazón y aunque no es que esté muy guapo, de alguna manera para mí lo es y creo que no he sabido demostrárselo.


Me abrazo a su cuello y le beso con pasión, solo separándome para quitarme la camiseta del pijama. - tócame, onegai. - me pego a él.