Nuevo amor, nuevos dolores de cabeza priv-Kunsel

A la mañana siguiente no recuerdo que Kunsel me haya acostado, solo recuerdo meternos en la bañera y luego nada de nada. me desperezo y noto a mi amante a mi lado abrazado. Acaricio con cuidado sus rubios cabellos y sorío hasta que... anoche no hicimos nada... mierda... Le dejé con ganas de nuevo, es para matarme. Pienso en proponérselo ahora, pero no quiero que me rechace como aquella vez que me escapé al baño, no podría soportarlo otra vez. Aunque el dice que le enciendo y le atraigo, la verdad es que las veces que he intentado excitarlo me he comido un enorme fracaso y no quiero repetirlo, por eso espero a que él quiera hacerlo.


Suspiro mosqueado conmigo mismo, pese a las indirectas que me mandó le "di plantón" de nuevo.


Me levanto sin despertarlo y veo que me vistió con un yukata cómodo. - por qué no consigo darle nada nunca? - digo con fastidio en voz baja. Lo único que se me ocurre hacer para compensarle es traerle el desayuno, aunque eso ni siquiera lo hago yo. Llamo al servicio de habitaciones y pido dos desayunos y cuando los traen Kunsel se despierta por el timbre.

- ohayo... - digo intentando que no se me note la pena, ya que seguro que me diceque es una tontería comerme el coco por algo así. - tienes hambre? - dejo su bandeja al aldo de su futón y luego cojo la mía y me siento con las piernas cruzadas y con mi desayuno. - etto... dormiste bien?

- Mmmm - el timbre es algo molesto, más aún en la mañana, no tenía idea de que hora era, escucha la voz de Ethan y sonrie aún adormilado - ujum... *se estira* tu dormiste muy rico... te vi - dice sonriendo, no como si le estuviera reclamando pero en verdad se notaba lindo durmiendo. - oh, pediste el desayuno¡ genial - se incorpora sentándose, la Yukata se le abría dejando a la vista su abdomen, comienza a comer - si, hace hambre.. ayer comimos muy bien pero creo que por la noche mi metabolismo se lo consume todo muy rápido - le observa.

- Sabes te queda bien la ropa tradicional japonesa - asegura para seguir comiendo, terminándose todo - como te sientes? no te afecto al brazo dormir en el suelo? - pregunta acercándose para tocar su brazo con cuidado

- ya... yo... siento haberme dormido, también estabas cansado y te hice cargarme, gomen. - hago un mohín antes de comer con apetito.


Le miro, es demasiado sexy pienso para mis adentros. - eh... ah, a ti también te queda estupendamente.

Miro mi brazo cuando se acerca. - Pues creo que no, espero, enserio, cris y Laura me matan. - toco sus dedos con los míos y le sonrío. - no me duele ni nada. - le sonrío. - que guapo estás recién levantado y muy gracioso además. - sonrío y le doy un corto beso.


(vengo)

- Jjaja oye no puedo estar guapo y gracioso al mismo tiempo sabes? - le acaricia la mejilla de manera tranquila y se acerca para besarle de manera más profunda, sus labios degustan los del mayor de forma suave en un beso largo muy sensual - tu si que estas bello recien levantado - asegura mordiéndole el labio inferior - anda vamos a cambiarnos para poder aprovechar este día tambíen . no es que no quisiera hacerlo con Ethan pero debido a lo de ayér creyó que el rubio no tenía humor asi que tampoco quería forzarlo a hacerlo.
Iré por las cosas que dejamos en el coche si, no tardo - baja a por la ropa que habían dejado y sube - toma cariño, a donde iremos ahora?

- Pues lo estás! - rio hasta que me besa de esa manera tan atrayente. - ngh! - me muerde y sonrío creyendo ver una oportunidad de hacer el amor con él, pero baja a por nuestra ropa antes de que me dé cuenta.

Suspiro y le espero cuando llega cojo mi ropa. En una pareja es importante la sinceridad pienso y yo no lo estoy siendo por miedo y eso es un comportamiento bastante cobarde. - Kunsel... - me acerco a él y mi dedo baja por la línea de su pecho que deja a la vista el yukata. - la habitación es nuestra hasta la 1 del mediodía... si tú quisieras... - digo algo temeroso de que me rechace o de que no le haya dejado claro que deseo hacerlo con él. - en 4 días me voy a Nigeria, no creo que tengamos más oportunidades antes de eso.

- Si? - voltea y mira a Ethan muy cerca suyo, sintiendo ese dedo recorrer su pecho - si yo quisiera?... - dice serio, pero luego sonrie y comienza a besarle de manera profunda - claro que quiero... te deseo Ethan... - dice recostándole con cuidado sobre los futon, el cuerpo del mayor se veía tan hermoso y erótico cubierto por ese Yukata que se había descolocado cuando le recostó, le mira, acaricia ese pecho y su mano se aparta solo para posarse en esas piernas descubiertas, subiendo lentamente - te dije que el Yukata sería conveniente... - susurra bajando a besarle en los labios, no quería lastimarle, se pone sobre él sin recargarse mirándole a los ojos, prueba sus labios, uno, dos besos cortos que poco a poco van profundizándose - hasta la 1 han?... *sonrie de lado* eso quiere decir que te puedo hacer el amor una..y otra... y otra vez? - pregunta con esa voz sensual

Cuando usa ese tono tan serio me sobresalto un poco pensando cosas bastante malas. Hasta que no eleva mi rostro y me besa no me quedo tranquilo. Le abrazo y poco a poco nos tumbamos en el futón, el se pone encima de mí y su yukata queda algo suelto, dejando más descubierto su pecho, me levanto un poco para besar esa piel suave y me vuelvo a tumbar sintiendo como acaricia mi pecho y me tenso un poco cuando sus manos van a mis piernas y suben por mis muslos, siento la tela suave deslizarse hacia abajo cuando va subiendo.

Me pone a cien en un segundo, mi respiración se vuelve un desastre y solo acaricio su rostro cuando me besa, esos labios que saben a yema de huevo. Me sonrojo cuando repite lo del yukata y vuelvo a besarle desesperado por su contacto.

Mis ojos parpadean sorprendidos cuando dice lo último, apra luego pasar a ser rendijas amenazadoras. - Con una vez vas que chutas - le retuerzo la nariz algo avergonzado y cuando se queja quito sus manos y la beso ya mas relajado pro ver una cara graciosa cuando se cogió la nariz quejándose. - te amo mucho. - musito.

¬o¬ y por qué me estrujas la nariz, si tu empezaste - dice sonriendo y le besa - oye también te amo, demasiado... realmente no creí llegar a amarte de esta manera - comenta sincero - y no por como eres, sino por ser un chico... y dioses... me excitas demasiado, tu piel... tus labios... tu sexo - dice comenzando a masajear ese lugar, le observa a los ojos sonriendo con total ternura y una pizca de picardía

- Espero que tu brazo no tarde mucho en curarse, quiero disfrutarte por completo - no le quita el yukata solo lo abre dejando a la vista sus interiores - tan sexy... - baja a lamer alrededor del ombligo como intentando exasperarle

- porque cuando empiezo tú te aprovechas. - digo después de que me bese.

Estoy escuchando sus palabras encantado hasta que toca mi sexo y pierdo el hilo. - aah... - me retuerzo un poco por como me toca.


- espera... - digo algo agitado cuando lame mi ombligo dispuesto a comenzar una mamada. - yo... quiero que nos corramos a la vez, creo que un 69 estará bien. - decir esto es bastante importante para mí, no se habrá dado cuenta, pero es la primera vez que expreso algo que quiero hacer con él en la cama, salvo esa primera vez que nos acostamos, aunque lo que estaba haciendo era pedirle permiso para penetrarle.

- Eh? se sorprende un poco cuando le detiene pero al escuchar eso asiente - mmm hoy estas de provocativo ... - dice sonriendo, sube a besarle - me gusta... quiero que cuando desees algo me lo digas - por fin, estaba escuchando a Ethan decir lo que pensaba, la proposición de hacer el amor, el como hacerlo

- Entonces... - comienza a desnudarse incluso la Yukata, pues le estorbaría - yo estaré arriba si? - dice sonriendo, de lado no sería prudente para Ethan, y el estar Kunsel abajo tampoco lo sería - se acomoda dejando su sexo al alcance del rubio, la luz entraba por las rendijas de la ventana dejándole ver totalmente lo que pasaba en la habitación, había dejado al mayor con la yukata y los interiores puestos - puedo? - dice acariciando el paquete del mayor esperando que le dejase hacerlo.

- No estoy provocativo. - replico, pero me besa y no soy capaz de decir más, respondo sus labios con ganas, a pesar de estar el día juntos pudimos besarnos más bien poco y si de algo tengo hambre es de sus labios, son tan resbaladizos, pero no cobardes, son emprendedores y no dudan en hacerse con los míos.


Asiento cuando dice que estará arriba, la verdad, no veo posible estar debajo. Veo como se coloca y tener su sexo colgando hacia mi boca me pone algo nervioso al principio. Me encojo un poco cuando toca mi sexo indirectamente. - a estas alturas vas a empezar a preguntar? - digo incrédulo y sonrío, sé que espera que diga algo erótico como respuesta, pero aún no soy capaz de muchas cosas por simples que le parezcan a él.


Suspiro y beso su muslo subiendo con algo de torpeza con besos tiernos y doy una lamida pequeña a su glande, no es que quiera desesperarle, pero tengo que acostumbrarme, poco a poco lo voy lamiendo con más brío y no me detengo aunque sus propias caricias me hagan jadear.

Gime al sentir los labios del mayor sobre su sexo, le gsutaba sentir como lo lamía y lo atendia, los interiores habían quedado relegados por ahí, sus labios estaban atendiendo directamente aquel pene que comenzaba a ponerse erecto como el suyo, su lengua se paseaba por cada milimetro de esa verga que palpitaba entre su mano, en su boca, la humedecia y degustaba por completo.

- Me encantas Ethan - susurraba antes de lamer el glande, pasear su lengua cerca del orificio uretral al tiempo que su mano masajeaba los gemelos

Cuando su pene se pone duro me quedo mirándolo un par de segundo, es tan sexy... acaricio uno de sus costados con la mano y luego bajo arañando su abdomen sin dejarle marcas en su piel más que por unos segundos y finalmente tomo su sexo en mi mano y aprieto el glande con el pulgar.


Cuando masaje o mis gemelos un espasmo me sobresalta y atraigo mis piernas a mi cuerpo, pero esta no es la posición de siempre y mis rodillas empujan a Kunsel por los hombros. - gomen... - sé que no le hice daño, pero le saqué de su tarea.


Suspiro intentando relajar mi respiración, pero su lengua hace esto una tarea imposible. Mi aliento caliente es exhalado directamente sobre su sexo. Estoy muy caliente pienso y beso su muslo de nuevo antes de incorporarme un poco y seguir humedeciendo su sexo y cuando este brilla por la saliba, meto el glande en la boca. - mmm... ngh! - muevo mi cabeza arriba y abajo solo chupando su glande, el movimiento es el mismo, pero yo lo siento invertido, aún así poder hacerle una felación es delicioso.

- Ngh... E-than...te lastime? - pregunta al sentir como le empuja un poco con sus rodillas, sin embargo al ver como intenta relajarse sabe que todo está bien, sonrie y vuelve a su tarea, su sexo estaba bastante duro al sentir como se interna en esa boca, lo mismo que su lengua masajea sus venas.

- Cariño... - le masturba cerrando los ojos debido a todo el placer, pero no puede quedarse así, baja nuevamente a mamar ese falo ya erecto también humedeciéndolo por completo, lame un par de sus dedos - separa tus piernas - pide, no iba a entrar, pero al menos quería masajear su interior, sus dedos se cuelan a esa entrada lentamente, primero uno, era sumamente estrecho, le comenzaría a preparar desde ahora para e momento en que pudieran unirse más adelante - ngh... a-ahi...hazlo otra vez - dice al sentir como la lengua de Ethan atiende el frenillo, se lo pide de manera amorosa.

Escucho como se lame los dedos y cuando me lo pide abro mis piernas dejándole espacio. La última vez que metió un dedo me corrí al instante, me propongo aguantar un poco más esta vez.


Aprieto ligeramente ese sexo en mi mano cuando mete un dedo. Es extraño, mi carne se cierra sobre ese intruso que le resulta desconocido.

Cuando me pide que repita algo sonrío tímidamente por haber encontrado algo que le guste que le haga. Aparto un poco más con mi boca la piel y mi lengua cosquillea en su frenillo con cariño intentando hacerle gozar todo lo posible.

Mi abdomen palpita agitadamente como si presintiera el placer, pero estoy dispuesto a dejar que me prepare un poco, quiero tenerle cuando antes, más bien, quiero que me tenga.

Gime constante al sentir como masajea ese punto de placer en su sexo, sus dedo entra un poco más, masajeando por dentro, moviendose en círculos para comenzar a dilatarle, era realmente estrecho, busca la próstata tocando de un lado al otro de ese interior, sonriendo, relamiendo el glande, metiendolo a la boca por completoe n busca de ese orgasmo, cuando siente que su dedo anda más libremente intenta meter un segundo dedo, nota una contracción de dolor en Ethan.

- Lo siento - dice sacando ese segundo dedo, debía de tener paciencia, baja a lamer los gemelos mientras el falo se apoya em su mejilla era bastante erotica esa visión

Cuando más se adentra su dedo más siento un picor por dentro, jadeo y gimo un poco, aún me estoy acostumbrando a ese invasor cuando se le suma otro y me sobre salta. Saco su miembro de mi boca. y mi mano sigue acariciándolo apra que no le duela. - está bien, no me lo esperaba, ngh ngh... puedo soportar un poco de dolor si es demasiado prometo pararte. - digo a duras penas, sé que no quiere hacerme daño y que no me lo haga yo a mí mismo.

Pasando de mi trasero a mi pene este está apunto de entrar en erupción, a duras penas lo consigo. Mi cadera comienza a moverse buscando más de su boca, pero no se atreve con nada brusco por ese dedo perforando mi trasero. Su sexo duro, se yergue hasta su abdomen y apenas puedo metérmelo en la boca, beso sus costados, mientras mi pulgar excita su glande intentando provocar su orgasmo.

Siente esas fricciones en el glande y gime gustoso, saca el dedo de ese lugar, no podía recargarse de Ethan y necesita devorar su mientras sin tardanza, su boca acuna ese falo tan erecto comenzando a mamarlo de manera fuerte y cosntante, su cabeza sube y baja y su mano acaricia sus gemelos constantemente, cuando siente como vuelve a lamer y a empujar el frenillo en su pene gime aun más, moviendo levemente sus caderas, masturba la base del pene de Ethan y chupa con fuerza arrancando un gemido al tiempo que su boca se llena de esa blanca esencia, y su semen invade la boca de Ethan al mismo tiempo.

Intento regalarle las mejores caricias a mi amante antes de su orgasmo, ni siquiera gimo cuando mi sexo suelta todo lo que guardaba en la boca de mi amante y él a su vez me imita. El semen inunda mi boca y esta posición no es adecuada para tragar. Me aparto tosiendo un poco y eso disipa un poco el placer que me ha provocado mi amante, pero cuando mi garganta deja de quejarse puedo disfrutar los restos. - estoy bien. - le tranquilizo. - Kunsel... túmbate conmigo. - le pido con voz inconscientemente inocente.

Lame el semen que había quedado en el pene de Ethan y se tumba a su lado, acariciando ese cabello con suavidad, mirándole directamente a los ojos

- Te adoro... sabes... eres un profesor traga años, realmente te vez más chico que yo... como lo haces=? - besa su hombro de manera amorosa, rozando con sus dedos esa mejilla, le pone encima una frasada para que no sienta frio y el se pone interiores tumbándose de nueva cuenta a su lado - cuando regreses de Noruega no te dejare dormir por una semana - dice divertido a sabiendas que se ganaría un zape

Me remuevo un poco mientras lame mi semen y noto mi sexo descender de tamaño, a la vez veo que el suyo también se queda flácido.

Cuando se tumba a mi lado le sonrío feliz y le doy un beso apasionado.

Escucho lo de que me veo más pequeño. - Pues... la enfermedad... cómo ves tampoco he crecido mucho... - hago un mohín de disgusto y bajo un poco los hombros desanimado. - Mi cuerpo va retrasado, aunque eso ha sido siempre así. Hasta los 3 años ni siquiera pude empezar a andar y así con todo.

Me coloco el yukata mejor cuando me tapa. - Nigeria. - le corrijo y tras pensar en su frase se lleva un zape. - ya estás pensando en eso?! hentai!

- No lo digo en ese aspecto - suspira, se preguntaba porque siempre tenía que cagarla con esos comentarios, no los hacia en mal plan - oye no soy hentai... porque el desearte tiene que ser hentai... yo no tengo sexo contigo... quiero hacerte el amor... y siempre sales con que soy hentai - dice también haciendo un gesto de disgusto, siempre era lo mismo, hentai, hentai, hentai, ya le estaba fastidiando un poco esa palabra, desear a su pareja era normal, querer hacer el amor con él era más que solo sexo.

No dice nada, suspira mirando al frente.

y qué quieres que haga cuándo buscas hacerme sonrojar todo el rato? te aplaudo? - digo yo también molesto. - sé que cuando lo haces conmigo es... importante para ti, también lo es para mí y escuchar esas cosas me avergüenza y no puedo evitar llamarte así. - suspiro, 24 horas sin pelearnos es todo un récord. Me levanto. - voy a darme un baño. - digo en voz baja y cojo mi ropa para meterme en el baño. No sé como arreglar este asunto.

Cuando salgo se ve que Kunsel está enfadado. Suspiro. - lo que tengas que decir es mejor que lo digas. - le digo simplemente. No entiendo muy bien el sentido de su enfado, yo sé que él no me quiere solo por el sexo, es algo simple de deducir, después de todo hay millones de personas más convenientes para eso que yo. Tampoco quiero ofenderle cuando le llamo hentai, es solo que no sé que hacer cuando me suelta esas cosas, nadie me las ha dicho nunca, aunque él diga que otros me desean sé que no es así, el caso de sasuke es algo aislado, no una norma general y realmente no me importa eso, pero no sé como dárselo a entender. No soy un orador que rebose confianza, pero tengo más de la que cree.


Voy a ordenar mis cosas, pero ya están recogidas. Solo puedo esperar sus reproches de haberlos e intentar solucionar las cosas y salvar el resto del día.