Nuevo amor, nuevos dolores de cabeza priv-Kunsel

Cuando se estira, al estar parcialmente encima suya, me mueve y me retiro para dejar que se despierte. - está bien. - digo dispuesto a dormir unos minutos más mientras hace el desayuno. Me hace cosquillas con ese beso esquimal y me acurruco en la cama contento de la dulzura que desprende mi amante.

Bostezo cuando vuelve con las bandejas y me rasco la cabeza desordenando aún más mi pelo. - arigato. - le miro encantadoramente, y es que los gestos de mi amante me cautivan a más no poder. - Yo también disfruto mucho despertar contigo, me gustaría ahcerlo todos los días. - cojo la bandeja para que se pueda sentar. - mmm... se ve sabroso. - digo partiendo una tostada a la mitad y llenándola de miel. - muy rico, gracias por mimarme tanto. - digo apoyándome en su hombro.

Recuerdo lo que hicimos en la noche y me sorprendo de que no me moleste nada el trasero, bueno, a pesar de no tener experiencia, fue bastante suave.

- cómo te dije tengo que ir a la universidad, podemos quedar a las 5 en el cine.

. Perfecto, entonces iré a trabajar también, así no me dirán que no para salirme temprano - aunque realmente nunca le decían que no, eran bastante flexibles con todos ellos, más cuando les drían casi un mes de vacaciones a Reno y Rude pues por lo regular eran ellos dos los que se ponían a trabajar cuando Kunsel y Zack no estaban.

- Te duele? - pregunta sobre el trasero del rubio, cuando le dice que no sonrie - me alegra, no me hubiese perdonado haberte lastimado - le besa en los labios, cuando termina se lleva las charolas - bueno, ahora regreso para que nos bañemos juntos, si?

Niego cuando me pregunta por mi estado físico. - nO me hiciste daño, me lo hiciste delicioso. - digo acercándome a su oído y mordisqueando su oreja, luego dejo que me bese en los labios.

- bañarnos? ok. - digo contento. - estuvo delicioso. - digo a lo de su desayuno y me meto en el baño llenando la tina con agua y jabón haciendo espuma. Cuando llega le abrazo besándole con amor y le sonrío bajándome los pantalones, sin razón alguna hoy estoy un tanto sugerente, pero sin llegar a los niveles del rubio. nos metemos en la tina y no dudo en sentarme sobre sus piernas y lavar su cuerpo con una esponja.

Observaba cada gesto del mayor y sonreía travieso.

- Oye... - le toma de la cintura cuando se sienta sobre él - me harás querer comerte antes de irnos y eso no creo que sea muy bueno para ti - dice a sabiendas que el rubio se cansaría bastante y tal vez no tendría las fuerzas suficientes para ir a la universidad, y tenía que preparar su presentación

- Te amo Ethan - le besa tiernamente en el cuello y luego el hombro mordiendo con suavidad - te comeré en la tarde

- Tienes razón, pero es que eres tan sexy. - suspiro gustoso cuando besa mi pescuezo y subo mi hombro cuando sus dientes se hincan muy poco en la piel. - será en la noche, iremos a cenar luego, no?


Le beso mientras presiono la esponja en su hombro. - te amo, kunsel, te amo. - entre besos y caricias cariñosas conseguimos terminar el baño y me visto con mi ropa de ayer, ya que voy a pasar por mi casa a por mi portátil y unos libros, por lo que podré cambiarme allá. - Cogeré el tren para casa ahora y... nos vemos en la tarde, tenemos una cita. - me pongo de puntillas y le beso una vez más. - sayonara.

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Nada más llegar a casa dejo organizado algunas cosas para la universidad y luego subo corriendo a mi cuarto. Mi modo de vestir últimamente es desarreglado, pero hoy quiero estar lo más perfecto posible para él, quiero sorprenderle completamente. Pienso en ponerme el traje blanco que compré en la tienda a la que fuimos juntos, pero eso me parece demasiado para ir al cine, aunque el restaurante a lo mejor es bueno y hay que ir elegante... le haré sentir mal si voy arreglado y él con ropas de soldado? Ojalá se ponga algo de ropa de la que le da Zack, echando un vistazo a su armario es muy elegante y le sentaría divinamente, aunque no voy a imponerle que ropa debe de llevar, si se siente agosto con esa ropa cómoda no me importa, se ve sexy de todas formas.

Voy pasando perchas y encuentro un conjunto perfecto que creo que es muy apropiado. Me visto y tras mirarme en el espejo mirando desde todos los ángulos que me permiten mis ojos y el espejo, como me queda sonrío satisfecho y cojo algo de espuma y un peine. pruebo algunos peinados, pero acabo echándolo hacia atrás y dejándolo ondulado con algún mechón corto cayendo sobre mi frente. Creo que con esto está bien... le gustó como iba para la boda, así que creo que mi aspecto así le gustará.

Spoiler:

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Tras pasar algunas horas en la universidad y comer allí, pero comida de casa, voy en coche hasta el cine. llego 10 minutos antes y suspiro, espero que no sea demasiado, pero quiero estar acicalado apra él. Salgo del coche tras aparcar y le espero en la puerta del cine.

- Ok ok¡¡ - estaba poniendose ropa a regañadientes, Zack estaba con él escogiendo que debía ponerse - sé que la ropa de soldado no debería usarla en una cita... pero me siento cómodo con ella - Zack le refuta, él mismo había pasado por eso, pero era Ethan, no él o Reno o Rude, incluso con cloud o Aeris le pasaba ir de soldado pero no con su pareja.

- Bueno... no me va tan mal - Zack sonrie ante ese comentario pues se daba cuenta que Kunsel realmente se preocuaba por lo que diría Ethan como él por lo que diría Hatori. Se despide para que no llegue tarde a la cita

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- Hola mi amor - llega al cine a hora puntual.

Spoiler:

- Wow... - se había quedado de una pieza al verle, realmente lucía bastante atractivo, se acerca y cuidando que no le vieran se acer a besar a su amante de manera suave pero no corta - dioses, te ves esplléndido - le acaricia la mejilla - aunque que te hayan visto así en la universidad me da celos

Le veo llegar y sonrío, no solo por verle, aunque es lo principal, si no por que se haya arreglado para mí, además de cierto alivio por si él venía con su vestimenta habitual. Que guapo es, me muerdo el labio cuando se me queda mirando, por una vez no es con hambre, si no con admiración. Esa camisa le sienta de muerte y esos vaqueros son algo ajustados, seguro que se encuentra algo incómodo, a pesar de eso no puedo evitar estar contento de que se haya tomado algo de tiempo en vestirse. - Hola. - digo algo nervioso, pero es algo que se me pasa cuando me besa, la suavidad de sus labios me hace pensar en un beso corto, pero lo alarga bastante haciendo que se sienta muy bien.


Rio suavemente cuando menciona sus celos, su mano se siente muy cálida. - Vamos, yo podría decir lo mismo de ti. Estás muy gallardo. - mi mano se pasea por los músculos de su brazo, le miro mordiéndome el labio, realmente se ve radiante.

- Bueno entonces somos un par de principes - le toma de la mano para entrar al cine, comprando los boletos de la pelicula que había escogido Ethan y pasan a la dulcería pues se le había antojado algo para picar de ahí, aparte de las palomitas se llevó un helado y unos dulces.

- Bueno... y de que va? - pregunta acomodándose en la silla del cine, Ethan a su lado derecho, no quería que nadie más se sentara a su lado así que esperaba que otros no quisieran pasarse de listos, sin embargo un par de chicas se acercaron a ellos preguntando si podían sentarse, kunsel asintió pero solo por educación realmente no les prestó mucha atención .

- Desde luego, tú pasarías por uno. - digo y veo como le miran un grupo de universitarias que están en la cola para ver el estreno de Amanecer. Me toma la mano y me lleva a otra cola. Paga las entradas antes de que pueda decir algo al respecto. Vamos a comprar la comida, yo cojo lo típico, palomitas, nachos con queso y coca-cola. Observo lo que cogió mi amante. - si el 50 % de la población comiera como nosotros, no existirían recursos suficientes para la otra mitad. - digo divertido. Cojo las entradas apra dárselas al que vigila delante de la sala, ya que mi amante tiene las manos llenas con la comida.



Nos acomodamos. - estoy muy contento de que podamos salir así. - le confieso, la otra vez que quedamos... además de pelearnos acabé con un brazo fracturado y se anulo claro, cuando fuimos a osaka fue un viaje, pero esto es lo primero que vamos a tener que sea considerado como una cita.

- Se sitúa en la Primera Guerra Mundial, y parece que la retrata bastante bien, comienza con el entrenamiento del caballo y parece que tiene una buena amistad con su criador, pero son apartados y el caballo pasa a vivir la guerra. Está dirigida por Spielberg y la banda sonora es de jonh williams, seguro que merece la pena, espero que te agrade. - picoteo alguna palomita despacio, no quiero acabármelas enseguida, pero son adictivas. Unas mujeres se acercan y preguntan por los asiento. Miro mi entrada, por qué preguntan, después de todo a cada persona le asignan un asiento. me encojo de hombros y espero a que empiece la película.

( aquí cada quien se sienta donde quiera en el cine XD)

- Spielberg?... bueno el no me agrada mucho... - comenta tranquilo - no sé siente que en ciertas cosas es muy comercial... si viviera Kurosawa-san seguro le ganaría los oscares - dice divertido, pero aunque no le agradara el director podría disfrutar la pelicula sin predisponerse a no hacerlo.

Continua comiendo como si nada, al menos no tendrían que ir a la dulcería en el intermedio, todo estaba tranquilo aunque lo que le fastidiaba un poco era el cuchicheo de las mujeres cerca de ellos, no le agradaba en lo absoluto que de vez en cuando les voltearan a ver.

.- Ethan... - le llama y cuando el otro voltea se acerca dándole un beso profundo, las mujeres les miran sorprendidas. - te adoro cariño - besa su frente para seguir mirando la pelicula con cara de satisfacción.

(jajaja, ok, aquí no)

- Yo también prefiero a Kurosawa-san, pero Spielberger también está muy valorado y esta película no es tan comercial si nos fiamos de las críticas. Mi favorita de Kurosawa es Los Siete Samuráis, pero ha hecho tantas que no he podido ver ni la mitad.

Apagan las luces al comenzar los anuncios y esa es mi señal para hincarle el diente a mis palomitas de maíz. Al igual que kunsel me molesta el cuchicheo, pero con él al lado no puedo ver a las mujeres ni lo que hacen.

Disfruto del comienzo de la película, que parece que va a ser muy emotiva. - mm? - le interrogo sin palabras para no molestar y me giro lentamente hacia él saliendo de los bellos escenarios de la película. Me estampa un beso de esos que quitan el hipo y hacen que las ideas dejen de fluir con normalidad. En verdad, me sorprende y a penas alcanzo a responderle con mis labios algo cortados por las palomitas, agradezco la oscuridad que oculta mi sonrojo hasta las orejas. La cara de mi amante se ve bastante complacida en la semioscuridad. Demonios, por qué tiene que besar tan bien? Tardo en volver a coger el hilo de la película y es que ese semental desubica.

Después de aquel beso las mujeres no dijeron más, se limitaron a ver lo que tenían que ver y listo. La mano de Kunsel toma la de Ethan en algunos lapsos, le comparte de su helado y después de un tiempo termina la pelicula.

- Bueno, estuvo bien, como dices no muy comercial - le besa la frente, las chicas se alejan ya sin siquiera dirigirles la mirada - entonces de aquí a cenar, te parece? - deja los envoltorios en el bote de basura al salir y toma de la mano al rubio, ya no le importaba si alguien le viera, que supieran que era pareja lo que deseaba para que así ninguna resbalosa o resbaloso quisiera meterse con el rubio, que se veía bastante bien vestido de esa manera.

- Vamos, te llevaré a un sitio que te encantará.... - caminan a unas cuatro cuadras del cine, una zona conocida por sus buenos restaurantes - qué te parece?

Spoiler:

No quería tomarle de la mano para no privarle de comer palomitas, pero él me la toma algunas veces lo que me reconforta. Sonrío cuando me ofrece helado, pero no como mucho, ya que si lo pruebo de más le dejaré sin él.


- A mí me ha gustado, tenía algunas imágenes muy bellas y se notaba que no todo estaba hecho por ordenador y la banda sonora conmovía. - me toma la mano y le sonrío. - hai! - digo convencido de que me gustará allí a donde me lleve.

Miro el restaurante y es bastante lujoso. - se ve maravilloso, pero está bien que comamos aquí? - Kunsel ha pagado tanto las entradas como la comida del cine, parece que quiere pagar todo lo que hagamos hoy y estoy algo preocupado de que pueda lidiar con la cuenta.

- ¬o¬ hablas con uno de los dueños de la cafetería de moda... y además estamos pensando en poner otra sucursal - dice orgulloso, les estaba yendo demasiado bien, con la alegría de Zack y Reno y la administración de Rude y él todo iría viento en popa, sumado a que no se habían gastado todo lo que ganaron en shinra, un sitio horrible pero que pagaba muy bien. - no quier... - le toma del mentó hablándole con una voz varonil y sensual - que pienses sobre la economía estando conmigo si?, si no pudiese darme estos lujos ni siquiera hubiera pensado en traerte aquí mi amor, está bien? - le sonrie y le hala la silla para que tome asiento. Tomandolo él después

Un mesero les pasa la carta

- El mejor restorant de París en Tokyo... - sonrie - esperemos no dejarles sin comida - comenta divertido mientras les sirven un buen aperitivo

- hai... tienes razón... lo siento... - digo totalmente avergonzado de como me tiene cogido y como me habla delante de todo el restaurante. Le dije que intentaría ser más abierto en público, pero eso lo dije anteayer y ahora me encuentro muy apenado. - arigato. - digo bajito cuando me aparta la silla y tomo asiento.


Nos pasan las cartas y nos traen un aperitivo a base de diferentes tipos de quesos y foie grass. A pesar de acabar de meterme para el cuerpo una bolsa de palomitas como el queso con apetito. - que rico. - digo antes de coger la carta. - a sí? Dijiste que no te gustaban los caracoles, a los parisinos les pirran. - Me limpio la mano tras coger el queso con la servilleta y agarro la suya y le miro ilusionado y complacido. - gracias por traerme aquí. - suelto su mano para seguir mirando la carta.

Cuando viene el metre a tomar la nota leo en la carta lo que he decidido. - una Bouillavaisse. - digo pidiendo una sopa de marisco. - y de segundo blanquette de veau. Gracias. - le pido un estofado entregándole la carta.

- Ok... pediré... Escargots... jajaja no es verdad... - dice divertido - quiero ratatouille... me ha entrado curiosidad después de ver la pelicula y.... potjevleesch... después pediremos el postre - entrega la carta también, había picado algo de queso pero tampoco era su prioridad, no es que estuviese verse no tan glotón, con Ethan podía ser como quería ser.

- Que nombres tan extraños... un día te llevaré a un restaurant alemán, intentaré recordar los platillos de mis padres... aunque no sé que tanto pueda recordar... - estas tan guapo... - dice pronto

- Tenemos que pedir trufas de postre, en francia las hacen deliciosas. - digo y me pongo la servilleta sobre las piernas como se hace en estos sitios y observo los tres tenedores con sus correspondientes cuchillos a cada lado y dos cucharas en frente del plato. Con lo de ir a cenar con la universidad o en fiestas algo exclusivas he aprendido para que es cada cubierto y cierta etiqueta, pero no es que sea un experto. - Sí, vamos un día a un restaurante de tu patria o, mejor, porque no esperamos a que acabes el semestre y nos vamos allí? - pese a ser sencillo, suelo pensar a lo grande a veces.

Estoy observando el centro de mesa con flores de lis. - que curioso en el siglo XII los franceses incluyen la Flor de Lis en su heráldica para representar un Sentido de Pertenencia y Hermandad entre los caballeros de aquella época, y de esta forma facilitar su reconocimiento, y nos ponen esa flor de centro de mesa. - comento haciendo alarde de conocimientos de historia pero sin querer presumir.

Mis mejillas se ponen algo rojas cuando menciona mi aspecto. - gracias. - le veo aún más encantado cuando me sonrojo. - tú te ves tan bien como un modelo.

- Modelo?... jajaja no creo, Zack era modelo y no luzco como él... perdió varios kilos - dice con algo de preocupación, aunque ya estaba bien no había podido ganar ese peso que perdió - sabes mucho... algún día podré mantener una charla más o menos decente contigo .- comenta sin sentirse menos, él conocía otras cosas que Ethan no, al final de cuentas el conocimiento llega para todos de formas diferentes, les traen sus platillos y cuando Kunsel se enreda con tanto cubierto le pide ayuda a Ethan, bien dicen que el que no pregunta tonto se queda.

- Me parece bien que pidamos trufas... esto sabe rico... - asegura probando un poco del plato fuerte

- Para mí luces mejor que cualquier modelo. - le aseguro. Observo como se preocupa por Zack, ya me comentó que comía poco. - sigue perdiendo peso? - le pregunto preocupado por Kunsel y por mi exalumno.


- Bueno, es que mi trabajo es saber de todo, aunque... no me pidas que te recite la tabla periódica ni nada que tenga que ver con fisíca o química. Odiaba esas asignaturas nunca pasaba del notable. - digo con algo de rencor en la voz. le miro con cariño. - Bueno, yo no diría tanto, es decir, no te puedo comparar con alguien que tiene un doctorado, pero se ve que sabes de filosofía y de literatura claro, y, aunque en el ajedrez soy bueno, en cualquier tema de estrategia y táctica me superas. - le aseguro, yo he dedicado mi vida al estudio, él ha tenido que luchar y entrenarse. - nunca me has dicho por qué te alistaste en el ejército.

Sonrío cuando se pierde con la vajilla y le ayudo un poco y le doy algunas claves para que se acuerde. Pruebo mi sopa con marisco. - sí. - respondo cuando alaba su plato.

- Pues... - se pone a pensar - creo... creo que hacia mucho no había pensado en ello... supongo que por lo mismo que todos, el reconocimiento... ser heroe... en eso me parecía a Zack, buscábamos lo mismo, pero no a todos se nos dan bien las mismas cosas, sumado a ello que él era como describirían los griegos... había nacido para ser soldado, y llevaba a cabo muy bien su papel, era tenaz, bastante testarudo, y tenía esa habilidad que shin ra buscaba, no solo era cuestion de querer... para escalar ahí tenías que tener ese algo en la sangre, esa... semilla de heroe - come un poco más - poco a poco fueron fijándose en él más que en mí, así que después de un tiempo me dejaron como estratega dándole a él misiones cada vez de tipo más difícil pero yo siempre estaba detrás apoyándolo, y él jamás me miró como algo inferior, al contrario creo que en cierto sentido, me admiraba

Le escucho y sonrío. - No era el único que lo hacía. - yo también le admiraba, por su profundo sentido de la amistad, por su fuerza unida a su inteligencia, además es muy noble. La mirada que le dedico es transmisor de ello.


Termino mi primer plato y retiro un poco el plato y no tardan en traer el segundo. Pruebo la ternera y parto un trozo mojándolo en la salsa de frambuesa y se lo ofrezco a mi amante. Sé que el sitio es formal, pero cuando me gusta algo tengo muchas ganas de compartido con kunsel y no solo la comida. - la comida es excelente, me agrada que me hayas traído.

- Entonces, la cafetería sigue llenándose? Me alegro por ustedes, Zack le ha puesto mucha ilusión. - sé que a Zack le encanta ese café, pero no me he atrevido a preguntarle a Kunsel si él quiere trabajar en eso, si quiere estudiar economía por él mismo o por el menor. Sé que le adora y le debe mucho, pero a veces me pregunto si no le da demasiado.

Come de lo que le da Ethan.

. Mmmm si está delicioso, yo quiero hacer cosas que te agraden porque verte sonreir hace de mi día perfecto - le manda un besito de manera tierna. - Oh si, diario está a reventar, no pierde el toque, y es que a cada día nos estamos renovando, afortunadamente hay muchos animes, y además también hacemos cosplay, o mejor dicho, hacen cosplay de peliculas famosas, de grupos de rock, Zack está pensando que algunas semanas se hagan cosplay históricos y se invite a las escuelas de educación inicial para enseñarles algo de historia mientras se divierten, estamos pensando en incluir karaoke construyendo en la parte superior, Reno y Zack son los cerebros locos del grupo y nosotros aterrizamos sus ideas a la realidad, no es algo tan descabellado, además que estamos buscando un local en Shibuya y otro en el Otome Road, y ahí sería un cosplay-yaoi coffe, en ese lugar esta la crema y nata de las fujoshi, así que buscaremos parejas de distintas edades y aspecto para que trabajen como meseros y en la cocina, personas que no les moleste que los demás sepan su preferencia sexual

Me sonrojo de nuevo cuando dice eso y ese gesto tan lindo e infantil de lanzarme un beso. Es tan mono pienso emocionado.


- guau! y eso solo con un mes abiertos. Cuantas cosas tenéis en mente, supongo siendo dos administrando eso os va bien, pero si algo se os dificulta quiero que cuentes conmigo. - le miro algo serio, soy maestro de administración de empresas y economía, no necesita acudir a alguien más estando yo. - te gusta ese trabajo? - me atrevo a preguntar siguiendo con mi plato y saboreándolo con pausa.

- Si, creo que un negocio tiene éxito no solo por saber que lo que se gana se debe reinvertir sino también por el modo de atenderlo, y esos dos son bastante buenos en atraer clientela... - asegura. Escucha esa pregunta - he? gustarme? - ladea la cabeza pensando un rato.

- Si me agrada, me gusta estar rodeado de mis amigos, es divertido, es algo en lo que soy bueno y además puedo ver sonreir a ese loco cada vez que se da cuenta que el negocio va "on going" como diría él, ha sufrido bastante y se da a querer - no es que Zack le gustara ni mucho menos pero le quería mucho, y era su mejor amigo, dos razones para sentirse a gusto a su lado y trabajando con él.

- Sumado a ello que no es nada peligroso comparado con el ejército, lo más que podemos esperar es que algún niño te aviente una pajita a la cabeza - sonrie - pero Zack les controla bien así que en ese aspecto tampoco hay que pensárselo mucho

Me pregunto si le hace más feliz ver sonreír a su amigo o a mí, no tengo motivos y lo sé, pero a veces no puedo evitar tener algo de celos.

- Pensé que te podría gustar más estudiar literatura. - le digo sincero, aunque yo tampoco cursé esa carrera y no por falta de ganas. - aunque sí que se te ve contento trabajando y muy relajado pese a que tenéis mucha clientela a veces.

Le miro. - me gusta cuando vistes como un civil, aunque el uniforme de soldado me trae recuerdos, pero así te ves guapísimo.