Nuevo amor, nuevos dolores de cabeza priv-Kunsel

Sonrie y comienza a meter un segundo dedo después de cubrirlo de lubricante, por nada del mundo quería hacerle sentir dolor, lentamente lo hace, invadiendo esa estreches, puede sentir como atrapa sus dedos pero no los aprieta demasiado lo cual es bueno, juguetea sintiendo como va abriéndose, dilatandole levemente, su sexo vuelve a estar erecto debido a esa imagen.

- Aquí entra el dildo, espera - con algo de dificultad logra poner algo de lubricante en el dildo con una mano - si te duele avisamen por favor - comienza a invadirle despues de sacar sus dedos, poco a poco sintiendo como va entrando en esa cavidad estrecha, jadea un poco incluso, mordiéndose el labio, era la primera vez que jugaba así con alguien y le excitaba sobremanera solo pensar que algún día el iba a ser el que entrara, le miraba de vez en cuando a los ojos - estas bien?

El segundo dedo es algo a lo que tardo en acostumbrarme, sobre todo porque se abren en tijeras y acarician mis paredes y hace que me cueste respirar un poco. Cuando toca sutilmente mi próstata me arqueo jadeando sonoramente y aferrándome a sus cabellos. - eso se sintió bien. - le miro y cuando veo el dildo me tenso un poco, pero asiento esperando a que lo cubra de lubricante, veo un botón en él. - los cogimos con vibración? - pensé que no eran a pilas ni nada. - ni se te ocurra pulsar el botón. - ¬.¬ le advierto con seriedad, sé lo mucho que le gusta a Kunsel jugar, pero bastante tengo con meterme algo así dentro como para que encima se mueva.


Suspiro y me mentalizo para tensarme lo menos posible, pero nada más sentir el frío del plástico mi entrada se estrecha un segundo para luego abrirse y dejar pasar lentamente el consolador. - ngh! - respiro a marchas forzadas, no me duele, pero siento como tira de mi piel y mis músculo. - No lo muevas, déjame acostumbrarme. - le oigo y me doy cuenta de que está excitado, eso me hace sonrojar. - kunsel... - mi pene también está duro. Intento cambiar de posición sin sentarme para no hacerme daño y acabo abrazado a él estando de rodillas y con las piernas abiertas por lo que tengo en el trasero. - mientras me acos... tumbro... - acaricio su pene con dulzura.

Está a punto de poner el primer nivel de vibración cuando le dice aquello.

- Okey.... - dice sonriendo de lado - me conoces bien, verdad? - sonrie mirando esos gestos. - Eh¡? espera Eh..Ethan... - suspira su nombre cuando siente como le estaba masturbando - no te vas a hacer daño... pero... se supone que esto no...va así - gime de manera varonil y con todo el dolor de su corazón le recuesta

- No quiero que te lastimes, esto es duro y puede lacerarte si no te mueves con cuidado - mira el rostro de Ethan - espera - se acomoda recostándose de lado, no precisamente para que le hiciera sexo oral, de echo estaba de tal modo que su mano alcanzaba su pene pero su boca no - ahrao separa tus piernas - comienza a mover lentamente el dildo dentro y fuera, de forma tranquila - parece que poco aah... ngh a poco esto va... más fácilmente - jadeaba por los dedos pasaeando por su sexo

¬.¬ - lo ibas a encender! - sonrío algo tenso por el dildo dentro. - la próxima vez podrás jugar. - le prometo, pero con tener eso dentro ya tengo suficiente por esta vez.

- No me hace daño. - le aseguro, pero le permito que me coloque de mejor manera. Es inevitable que jadee cuando ese dildo se mueve dentro y fuera, dejo caer mi cabeza sobre la almohada de lado mirándole cuando esta sensación nueva me lo permite, no es tan placentero como cuando me hace una felación, pero sé que cuando sea su sexo quien entre se sentirá maravilloso. Mi mano agarra con firmeza su sexo y lo toca con presteza. Beso su rostro mientras jadea, pese a que yo también lo hago, mi amante está mojado y puedo masturbarle deprisa, pero me detengo a tocar lugares clave, como el frenillo o el orificio uretral. - kunsel... ah...


(bye, hasta mañana)

- Ethan... eres endemoniadamente sexy... - dice gimiendo por como le masturba y no se controla, comienza a lamer el sexo de su amante al tiempo que le sigue penetrando con el dilde de manera constante pero con cuidado de no lastimarle, su mano va y viene.

Escucha como gime su amante y eso le caliente aún más.

- Me gusta oirte gemir así mi amor... lo haces... tan diferente a cuando solo te hago sexo oral - comenta esperando no incomodar a su amante, mirar esa entrada que se abre cuando mete el dildo y como se presiona hacia dentro, como se desliza un poquito más fácil, pero sabe que aun falta tiempo para que pueda entrar.

Me voy a quejar cuando su sexo queda lejos de mi alcance cuando baja a lamerme, pero me lo impide... lamiendo mi sexo evidentemente.

Me roba más y más gemidos, el dildo entrando y saliendo duele un poco, pero cada vez se hace más fácil y noto como entra más y más en mi carne, a donde los dedos de Kunsel no había podido llegar. Mi sexo en su boca se siente demasiado caliente, siento como lame las venitas de este y me muevo desesperado por correrme, ese consolador en mí está tocando mi próstata. Las palabras de mi amante me hacen ruborizar aún más, no hay forma de que me acostumbre a esos comentarios suyos, pero tampoco puedo decir que me disgusten, realmente, ahora no puedo decir nada, mi garganta solo alcanza a gemir, jadear y, a duras penas, respirar.

No deja de lamerle y succionarle de manera constante mientras comienza a sacar y meter el dildo con algo más de rapidez pero sin dejar de ser cuidadoso.
Se da cuenta que el otro está pronto a correrse y sonrie gustoso por ello, sencillamente deseaba que Ethan llegara al climax, verle y escucharle como siempre, le había extrañado.

- Correte - dice antes de atacar su sexo con más ímpetu succionando de manera un tanto fuerte

- ah! - mueve más el dildo y a más velocidad y eso me sorprende, pero no me hace daño ninguno, no más que el que puede hacer usar un consolador en un hombre. Estoy pronto a correrme, pero y Kunsel? Su sexo estaba bastante motivado, pero no puedo tocarlo mientras siga lamiéndome.

- Kunsel, ngh! me vengo... aah... - mis caderas parece haber cogido un poco el ritmo del dildo y se mueven acompañando la mano de mi amante y procurando no hacerle daño cuando traga mi sexo. - ah.. dios... - agarro su cabello en un puño y me dejo ir en su boca con un profundo gemido de lo más hondo de mi garganta. Mi cara es de placer por estar con este hombre

(no te esperaba ya)

(acabé antes de lo previsto )

siente como se corre en su boca y traga todo el semen de su amante, degustándolo por completo, relame sus labios y saca el dildo con cuidado, lamiendo un poco la entrada de Ethan la cual estaba totalmente humedecida.

- Wow... realmente te corriste bastante - dice sonriendole con ternura, acaricia la pelvis del mayor y da un par de besos en el glande y después cerca de su ombligo para despues subir a sus labios, besándole de forma tal que parecía querer comérselo a besos

Me fijo en como se relame los labios y aunque le sonrío no puedo impedir sonrojarme de que se lo haya tragado. Me muerdo el labio cuando extrae el dildo y cojo una bocanada de aire antes de exhalarlo. Me tenso cuando lame mi entrada por lo sensible que está mi trasero tras esa profanación.

- hace bastante que no lo hacíamos. - respondo cuando dice eso y sonrío. Pongo una mano en mi abdomen esperando a que mi respiración se calme del todo. Me pongo más rojo aún cuando besa mi glande y sube por mi cuerpo. Acaricio sus cabellos cuando besa mis labios, jadeo dulce cuando sus labios devoran los míos. Acaricio su espalda y me separo mirándole. - veamos... cuanto te corres tú. - digo palpando su trasero antes de volver a atender a ese insatisfecho sexo. - que duro estás... - musito en su oído antes de seguir besándole. Mi mano masturba ese sexo sin descanso regalándole mis mejores caricias

- Con la visión que me diste... quien no lo estaría, eres tan sexy - se tensa un poco cuando comienza a masturbarle pero suspira, sonriendo con los ojos entrecerrados mirando a su amante. - Ngh... me gusta como lo haces - le da suaves besos que se intercalan con besos más apasionados, no quería dejarle ir en ningún sentido

-Te amo Ethan - sus caderas se mueven de manera tranquila contra esa mano, lentamente como si penetrara algo, la mano de su amante le masturbaba de manera deliciosa - un poco más rápido - susurra de forma varonil y totalmente deseoso de esas caricias.

Sus caderas se menean contra mi mano y una de mis manos en su trasero le impulsa a ello, conduciendo su movimiento, aunque no haga falta, pero poder aprisionar una de esas firmes posaderas en la mano es por demás erótico.


Ver lo mucho que desea mi amante entrar en mí es algo que me motiva, solo espero que pueda entrar. Cuando me pide prontitud en mi masturbación, aprieto con fuerza su glande torturándolo un poco y plegó la piel acariciando la carne directamente, antes de acelerar la masturbación. Me hace sentir tan bien que no creo poder ser mñas feliz. - También te amo, mucho. - le aseguro sin detener mis caricias y mirándole de forma clara a los ojos.

Se da cuenta de esa mirada en los ojos de su amante, lame el labio superior degustándole de manera tranquila, pero de pronto comienza a jadear de manera más erótica, sus labios se entreabren, rojizos por el sexo oral de antes, se notaban más que apetecibles, sus ojos se cierran totalmente.

- A-ah... si...Ethan... así... - se muerde el labio inferior moviendo algo más sus caderas, un gemido ahogado y varonil escapa de sus labios al tiempo que su semen mancha la mano de su amante, recarga su frente en la del otro. Había eyaculado bastante y su sonrisa era de satisfacción.

Suspiro cuando se viene, si hubiera tardado unos minutos más creo que me habría vuelto a poner duro, ese cuerpo voluptuoso sobre mí emanando calor, esos labios entreabiertos jadeando que parecen una rosa de color escarlata, y esos ojos, esas bellas turquesas reluciendo entre sus párpados... es como para ponerse caliente.

Sonrío un poco, creo que con lo del consolador ha quedado algo más saciado, la próxima vez le dejaré que lo encienda. - Te adoro. - acaricio su mejilla y me aúpo besando sus labios con ternura, abrazándome a su cuello.


Me lamo el labio tras esto, he notado mi propio sabor en sus labios, me tumbo en la cama. - estoy agotado. - acaricio su hombro en una caricia algo débil. - No ha sido tan difícil.

- Ha sido genial... tu rostro... ver tu cara llena de ese placer fue agradable, excitante... aunque sentí celos - dice sincero - algún día quiero ser el responsable de hacerte gozar de esa manera - le besa en los labios para después sepárarse. - y noté que te encanta mi trasero... no dejabas de tocarme y apretare de una manera tal que creí que me querías quitar el trasero. - besa su nariz y después se separa

- Iré a por tu jugo si, no te muevas,, enseguida regreso - se baja y camina desnudo por el departamento regresa después de un rato - toma, bébelo - se sienta a su lado comenzando a tomar también uno

- No seas tonto, eras tú quien me hacía gozar, eras tú quien me excitaba por como me mirabas.

Me sonrojo cuando dice lo que hice con respecto a asu trasero. - digamos que tienes un trasero sólido. - sonrío a medias.

Voy a decirle que no vaya a por el zumo, que estoy bien, aunque me encuentro cansado, pero sale del cuarto antes de que pueda hacer nada. Me siento y noto bastante molestia en mi trasero. Cuando le veo aparecer desnudo no puedo evitar echar una ojeada al esplendoroso cuerpo de mi amante, todos sus músculos marcados y tonificados, al contrario que los míos, apenas si se marcan y desde que me pusieron la escayola he perdido 3 kilos, pero no es nada preocupante, ya que los he perdido de masa muscular y los recuperaré cuando vuelva a hacer ejercicio y coma de nuevo las calorías necesarias para dicho entrenamiento. - arigatou. - digo tomándo el zumo en mis manos.


Miro el consolador sobre la cama, parece mentira que haya podido meterme algo así. Me apoyo en el hombro de Kunsel. - eres tan cálido. - beso su hombro y su barbilla, me bebo el jugo tranquilo. - olvidé decirte, al final me han cogido para la conferencia de MuRAKAMI, será en la facultad de Literatura el jueves que viene. te interesa? vendrás? - digo por si le interesa venir, aunque si le resulta aburrido no seré yo quien le pida venir, aunque tengo que reconocer que me haría un poquito feliz verle entre el público.

Cuando se apoya en él le abraza por el hombro de manera suave atrayéndole un poco más.

- Felicidades cariño¡ - le da un beso en la frente y le sonrie feliz en verdad por él - bueno... jueves... no tengo inconveniente, y me encantará verte ahí en el estrado será algo maravilloso, presumir de que aquel hombre tan culto es mi pareja me llena de orgullo - se termina el jugo y lo deja sobre el buro junto a la cama.

- Y qué más planeas hacer - se separa un poco para ir a guardar el dildo, no sin antes lavarlo bien. Le escuchaba desde el baño así que no habría problemas. - bueno, ahora se quedarán en el armario - los guarda y regresa, se había puesto ya sus interiores ajustados que marcaban bien ese redondo y firme trasero, más firme aun al haber retomado el entrenamiento militar al que le sometía Rude.

- arigato! - respondo cuando me felicita. Le miro ilusionado por lo que dijo después, está orgulloso de que sea su novio, ya no tiene dudas con lo de salir con un hombre, conmigo.


Voy a besarle, pero se levanta y hago unos morritos que no llega a ver al entrar en el baño. - Bueno, quiero preparar bien la conferencia, así que me dedicaré a eso en las mañanas. Mañana tengo que ir a la universidad, puede que no tenga que dar clases, pero debo seguir investigando y para eso tengo que ir allá. - me da algo de miedo ir a la universidad, pero no voy a molestar a Kunsel con eso, además... sasuke ya no está por allí.


Le veo aparecer con los bóxers que marcan deliciosamente lo que deben marcar. - te apetece hacer algo mañana? realmente no tengo mucho que hacer.

- Me parece bien... pero estás seguro? es decir... es seguro que vayas solo? realmente no tengo mucha confianza con respecto a que estés ahí... - dice sentándose a su lado mirándole a los ojos, le tapa con una frasada pues no quería que se resfriara

- Mañana, tengo que arreglar primero algunos asuntos del cafe, después de eso podemos hacer lo que desees, te digo ya que soy administrrativo - sonrie acariciando esas mejillas tan suaves - te vez... diferente... es decir, siempre te ves hermoso pero hoy estas radiante - se acerca dándole un beso porfundo - te adoro... te amo - se separa pero solo para acercarse un poco más a él y poderle besar de manera aún más profunda.- y cual será el itinerario de mañana?

- es mi trabajo, tarde o temprano tengo que ir y sasuke... creo que está en prisión preventiva. No te preocupes por mí, estaré en la biblioteca de mi facultad. - sonrío cuando me tapa, me cuida todo el rato.


- Por una parte me alegro de que no tengas que trabajar tantas horas, pero por otra... echaré de menos verte de cosplay. Estaba esperando a que te tocara un traje de policía para que me cachearas. - le digo provocativo. No me cuesta decir este tipo de cosas, pero cuando me las dice mi amante me muero de vergüenza.


Ladeo la cabeza sin comprender a lo que se refiere con radiante. - no digas tonterías, anda. - se acerca apra darme otro beso y le respondo con ganas acariciando su pecho, estos besos suyos me vuelven loco. - Podríamos ir en la tarde a ver una película y luego cenar fuera. ¿te apetece? - le pregunto.

- Si me apetece... además... sabes que? sobre lo de vestirme de policia... bien podría vestirme para ti y... no sé... castigarte un rato - cuela su mano por debajo de la frasada y le aprieta el trasero con picardia.

- Qué pelicula quieres ver? yo no tengo un género que no me agrade o que no me anime a ver así que podemos ver la que desees - siente esas manos en su pecho y sigue besándole - sobre la cena.. tengo un par de restaurantes que *beso* se ven bastante agradables.. - succiona su labio inferior dejándolo humedecido y rojizo.

- Te amo Ethan... - baja besando su cuello, lamiéndolo y dándole un par de mordidas pero sin dejar marca aunque bien hubiese querido hacerlo

- mmm... castigarme? he sido malo? - le saco la lengua y mis mejillas están sonrosad en señal de que no puedo seguir con la broma por lo apetecible que se me hace lo que me propone. - te tengo dicho que no manosees la mercancía. - digo después de sorprenderme por como agarra mis nalgas y le saco la lengua de nuevo.


- Pues, me gustaría ver Caballo de batalla, parece que está bastante bien, las críticas son muy buenas, ya que se ve una guerra desde el punto de vista del caballo. Ok, como elijo peli, te toca escoger el restaurante.


Sonrío por sus besos, es como al principio, cuando estaba haciéndose a la idea de que le gusta un hombre y me besaba en todo momento bastante apasionado. - te quiero, me encantas. - jadeo en silencio cuando su boca se divierte en mi cuello y sujeto su cabeza con la mano, enredando mis dedos en el pelo rubio y claro. Me gustaría poder seguir satisfacciéndole, pero eso del dildo me ha dejado agotado y no creo poder


(hasta mañana)

- Eres encantador sabes? - continua con esos besos, uno tras otro llenando la pies de caricias, aunque al verle a la cara nota ese cansancio - lo siento Ethan - dice con rostro amable y le besa una ultima vez en los labios

- Vamos a descansar vale? - le besa en la frente y se levanta para ponerse unos interiores dejando que el mayor se acomode en la cama para poder dormir - mañana haré el desayuno y te lo traeré... me gustaría que sea sorpresa pero casi siempre te levantas minutos despues que yo, asi que si te paras te acuesto de nuevo - toma un poco más de jugo

- soy yo el que lo siente.- digo respondiendo a ese último beso amable.

Cuando se levanta para ponerse unos interiores le pido unos también y un pantalón de pijama. Tras ponérmelos algo de ropa nos tumbamos y me abrazo a su cuerpo. - de verdad? Me encantaría. - digo sonriente y beso su pecho castamente. - sí, vamos a dormir. Oyasumi. - me acurruco contra su cuerpo esperando no molestarle o parecerle empalagoso, pero ha sido mucho tiempo sin poder abrazarme a él como Dios manda por la escayola. Me incorporo cuando apaga la luz y a ciegas beso sus párpados cerrados y me duermo con una sonrisa en los labios.



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A la mañana siguiente me despierto a la vez que él. - ohayo. - digo adormilado, pero con una sonrisa en la boca. - dormiste rico? - pregunto acariciando su pecho con la palma de la mano.

- si dormí bastante bien - se estira - bueno cariño, ire a preparar el desayuno si?, no te muevas, duerme un poco más, es temprano y tenemos el día para nosotros, disfrutame porque al ir al colegio no podré estar tanto tiempo contigo - le da un beso esquimal y se levanta para ir a preparar todo.


Regresa tiempo después con las charolas de ambos, pues quería desayunar en cama con él

- Espero te agrade - llevaba todo lo necesario para alimentarle bien, y lo suficiente ´para llenarse ambos - me encanta despertar contigo


(hola de nuevo tardare media hora en contestar XD)