Una cita de trabajo (privado Arisada )

Les veo desaparecer entre las ramas y en menos de un minuto ya aparecen por encima de las copas de los árboles. Shinnosuke tiembla de emoción allá arriba y me saluda gritando mi nombre justo antes de agarrarse con fuerza a Cloud que le avisa que va a saltar. Los gritos de emoción son inminentes, primero grita y cuando Cloud cae sobre la copa de un árbol mi hermano ríe encantado y pide más. Cuando Cloud hace piruetas en el aire parezco asustarme más yo que mi hermano que las disfruta solo como un niño al que un adulto le ha asegurado que no le ocurrirá nada. Tras varios saltos aterrizan en el suelo. Este hombre es sorprendente.

- otra vez, otra vez. - dice sin parar de reír abrazándose al cuello de Cloud. - Podremos hacerlo otro día? Podrías enseñarme a hacer eso? Pareces spiderman. - dice contento antes de bajarse. - Muchísimas gracias, Cloud-san, ha sido alucinante. - dice recuperando sus modales.


Sonrío y me acerco arreglándole el pelo que se le desordenó completamente en el vuelo. - arigatou. - le digo a Cloud mirándole con agradecimiento.


- Y dónde quieres comer ahora? - quiero una hamburguesa, okasan no me deja comer comida rápida nunca. ¿podemos? - Sí, sí, solo pasaremos por alguna tienda de sandwich caseros, ya sabes que no me gusta la comida rápida.


Salimos del parque y no para de hablar de lo que se le pasaba por la cabeza en los saltos y de lo impresionante que ha sido. Asegura que después de eso volar con las cuerdas en la obra de teatro será pan comido. Compró unos sandwiches, unos 5 de diferentes rellenos y un termo con un té de vainilla. Y Cloud elige otra tanda de lo mismo que pago yo como agradecimiento por lo del parque.


Llegamos al burguer y pido un menú infantil con patatas grandes y bebida pequeña. Nos sentamos y cada uno disponemos la comida como nos place en la mesa. Me siento al lado de Cloud, ya que parece que Shinnosuke necesita espacio para investigar los juguetes que le han regalado con el menú. No puedo evitar revisar el móbil cuando mi hermano está entretenido y es que es raro que no haya recibido ni una llamada. Se ha abierto en algún momento en mi bolsillo y se ha quedado sin batería de ahí que no haya sonado ni una vez. Bueno, tanto mejor.

- aja, todo perfecto, es bueno pasar un día sin móbil. - lo guardo en mi bolsillo y desenvuelvo uno de los sandwiches y me sirvo el té en un vaso de plástico. Ofrezco a Cloud y cuando Shinnosuke me pregunta el sabor y le digo que es de vainilla. Pensando que sabrá como el helado del mismo sabor me pide un sorbo, pero no le agrada y hace una cara bastante graciosa en el momento en que piensa si escupirlo o tragarlo, finalmente lo traga y bebe un buen trago de fanta de naranja quitándose el sabor de la boca.


Tomo los sanwiches con semejantes modales a los del restaurante, aunque los coja con la mano y cuando me mancho un dedo con queso me lo llevo a la boca disimuladamente antes de limpiarlo en la servilleta. Sonrío por como tiene que abrir la boca el niño para poder dar un mordisco a la hamburguesa sin que se caiga el ketchup por los lados. - está buena? - asiente con energía masticando con entusiasmo. Pone las patatas en medio de la mesa por si queremos coger alguna. Y también nos ofrece unos bocaditos de camembert frito. Acepto y estira el brazo para que me incline a cogerlo con la boca y sonrío al atraparlo con los dientes volviendo a mi sitio y cogiéndolo con la mano, ya que no puedo metérmelo entero en la boca. Shinnosuke habla entusiasmado de sus compañeros de clase y de las clases de lengua, dice que le encantan los poemas que le manda leer la profesora, y que es su ojito derecho, también habla de la obra de teatro con entusiasmo, todo eso cuando no tiene la boca llena de carne, verduras y pan.


Cuando estoy por terminar, ya con el último sandwich descansando en una servilleta de color verde, veo entrar al guardaespaldas por la puerta. LLevo una mano al brazo de Cloud y lo ve también. me pongo tenso y Shinnosuke me pregunta si el té me dio dolor de estómago. - no es nada. - digo con voz calmada para no alterarle. - Deja, te abro el yogur...

- Sí, tenemos que ensayar la obra, será mejor que volvamos después de comer. Cloud, llama para que nos venga a recoger un coche. Mi celular se quedó sin batería. - digo actuando normal. El guardaespaldas solo miró una vez en esta dirección, luego pidió un menú y se sentó lejos, lleva gafas de sol por lo que no es fácil saber si mira hacia aquí.

- pero yo quería ir a los recreativos y jugar a la máquina de bailar, Papá dice que bailas muy bien y quería competir contigo. - dice haciendo morritos.


- Shinnosuke. Vamos a ir al hotel o te llevaré a casa. - le digo serio y el niño no protesta más. Sabía que no debía traerlo conmigo. Quizás debería llevarlo a casa, pero le prometí que estaría el día con él. Me odiaría si le hiciese eso, pero mejor que se enfade que le pase algo.


Esperamos al coche y nos levantamos cuando lo vemos aparecer por la ventana. - Venga, Onii-san te llevará en brazos. - le cojo acomodándolo en mis brazos. - ouch! ya pesas. - le beso la mejilla. Y ando a fuera con Cloud al lado. Agarro con fuerza a Shinnosuke, veo como Cloud se queda mirando un coche y eso me hace tragar saliva. Cruzamos y cuando Cloud abre la puerta meto a Shinnosuke con algo de prisa y yo me cuelo a su lado.

Llegamos al cuarto y bajo. Subimos a la habitación y pido a dos guardias que escolten la puerta. El niño va al baño después de darle las gracias a Cloud. - Pasará la noche aquí, hasta que sea seguro. Aunque quizás sería mejor ponerlo completamente a salvo, si lo cogen tendrán un medio para coaccionarme. Sé que te ocuparás de ello. - sonrío tenso y cierro la puerta con llave.


Suspiro y estoy dispuesto a no mostrar miedo, tensión o nervios delante de Shinnosuke. Me pide ver un documental que estaban echando sobre manga y nos sentamos muy tranquilos, al menos él, en el sofá y lo vemos largo rato. Pongo el móbil a cargar y lo enciendo, ya que tal y como están las cosas lo puedo necesitar. Cierro las cortinas con la excusa de que me gusta ver la tele a oscuras y sería bueno actuar con poca luz en esa escena de Peter Pan.



Después de eso me distraigo un poco aprendiendo las acotaciones de la obra para solo tener que leer los diálogos. Y la repetimos unas 6 veces hasta que le sale. Después de eso está bastante cansado y aunque es media tarde se echa una siesta en la cama grande que preside el cuarto. Suspiro acariciando su pelito y mirando como cuelga graciosamente una de mis camisas de sus hombros, ya que se ha cambiado para dormir. Mis dedos dan vueltas al móbil varias veces esperando una llamada de cloud.

Finalmente me llama. - Cloud. - contesto y escucho sus indicaciones. -Es realmente grave.... está bien, lo haré. Confío en ti, no me defraudes. - cuelgo el teléfono y toqueteo la pantalla táctil buscando algo que hacer en el celular, pero no encuentro nada y solo me tumbo al lado de Shinnosuke que duerme plácidamente. Le beso la frente y miro que son más de las tres. - Con todo lo que pasa y tú estás tan tranquilo. Solo puedo pagar gente para que te proteja, yo no puedo hacer nada.


Poco después el guarda llama a la puerta anunciando la llegada de una mujer y me pide permiso apra abrir. Se lo doy y saco la llave dejándola pasar y vuelvo a cerrar cuando entra. Pongo un dedo sobre mis labios para que guarde silencio, ya que shinnosuke duerme, aunque solo sea una siesta, cuanto más le dure mejor. Nos alejamos un poco en el amplio piso.- No sé tu nombre. - digo

Asiento dejándola hacer su trabajo. Me siento al lado de mi hermano y acaricio su cabecita. Miro a la mujer, es hermosa de verás, de no estar las cosas como están me habría fijado en ella.

Shinnosuke se remueve y tras un bostezo lleno de dientes de leches rezagados se sienta frotándose los ojitos. Sonrío besando su cabeza. - Menuda siesta campeón.

- Esta es tifa, nos va a cuidar mientras Cloud termina de atender unos asuntos personales.


El niño la mira y al estar despreocupado él si repara en la belleza de ojos almendrados y mirada dulce pese a su aspecto duro. - Qué guapa! es tu novia, Onii-san? Si no lo eres esperarías a que creciera y te casarías conmigo? - dice pícaro como lo es un niño. Casi rompo a reír de lo absurdo de la situación. - No acoses a la señorita. - Yo no acoso, me estoy declarando. - sudo una gotita. - Por qué no ve sun rato la tv? no echan a esta hora el programa que te gusta? - ya es tan tarde?! Casi me pierdo mi anime preferido, por qué no me despertaste? - dice corriendo al sofá olvidándose de tifa.

Me siento con él a ver la tv. Es un anime que se acaba de estrenar, el típico shonen con mucha acción y héroes que transmiten valores como la amistad y la justicia. No le presto mucha atención. Giro el rostro cuando se oye a hablar a Tifa por un pinganillo en el oído.


Poco después Tifa le abre la puerta y el rubio se muestra tranquilo incluso trae un juego de mesa que mi hermano adora. ¿de dónde lo habrá sacado? me pregunto, de seguro le preguntó a Yukio, pero no sé como han tenido tiempo de comprarlo.

-waw! Gracias, Cloud. - dice agarrando el juego y sonriéndole. - Onii-san, juegas conmigo cuando acabe el anime, verdad? - iba a proponérselo a Cloud y Tifa, pero algo le dice que están muy ocupados como para jugar y lo deja pasar. La emoción de saltar por los aires había sido una experiencia para él y no quiere molestar a Cloud más por hoy.

Cuando le veo aparecer de alguna forma me siento más tranquilo, una respiración tranquila se escapa de mis labios y asiento a mi hermano mirando al guardaespaldas mientras el pequeño organiza todo el juego sobre una mesa. Su mirada me dice que todo está controlado y eso es un alivio añadido.

El niño asiente aunque no comprende el porque del cambio de cuarto el poder pasar el día con su hermano parece condicionarle a portarse bien para que siga siendo así e incluso poder quedarse a dormir. Recoge el juego y lo mete en la caja que acomoda bajo su brazo. Se ve gracioso llevando la enorme caja que parece casi tan grande como él.

Cuando nos escoltan en el ascensor me fijo en lo bien que se ven esos dos juntos. No es que tifa sea ruda, pero se ve que es fuerte y viste unas ropas muy semejantes a las de Cloud. Los dos son musculosos, sin exagerar, cuerpos armoniosos. Se miran con total confianza en el otro.


Cloud se despide y entramos en la habitación. Tifa lo revisa todo y Shinnosuke coloca el juego y espera a que me una a él. Shinnosuke le explica sus jugadas a Tifa creyendo que es realmente bueno en ello, pero muchas veces no se sale con la suya y avanzo yo más que él. Al principio, el juego de ingenio, me mantiene algo ocupado y distraído, pero luego no paro de pensar en si estará todo bien.

Me sorprendo cuando Cloud llama desde la ventana, aunque supongo que no me sorprende mucho que decida aparecer por ahí. Mi hermano lo mira asomado sobre el respaldo del sofá. Mira emocionado, aunque con carita de sueño espera con ansias que Cloud le cuente una aventura, pero cuando le ve ensangrentado se asusta. Le cubro la cabeza rápidamente con los brazos para que no lo vea. La visión me impacta, pero solo me levanto cogiendo a mi hermano y arrastrándolo a una habitación diferente del piso. - es hora de dormir.


- eso... era sangre?

- De un animal, tranquilo. - miro a cloud con desaprobación cuando pasamos a su lado procurando que mi hermano no lo vea. ¿en qué está pensando apareciendo así ante un niño? Meto a Shinnosuke en la cama de Cloud. - No te preocupes, Cloud está bien, solo hubo un accidente en la cocina y reventaron todas las piezas de carne. Da asco, eh?. - digo sin que sea muy creíble. - Descansa, tienes cole mañana. - beso su frente y salgo cerrando la puerta.


Veo a Tifa preocupada por Cloud que se ha debido de marear. Está lleno de sangre, pero el color pálido de su piel al entrar parece haber remitido un poco. - ¡ eres un inconsciente! ¿qué haces entrando con esta guisa delante de mi hermano? Demonios!- pongo una tarjeta sobre la mesa. - úsala para coger otro cuarto, Shinnosuke se ha quedado está pro dormirse aquí, así que si está todo solucionado quiero te veré mañana y ya hablaremos. - digo echándolo de su propio cuarto. Voy al lado de mi hermano que me ha escuchado hablar alto. - le estaba regañando por aparecer en esas guisas ante ti. - me quito la ropa dejando mis calzoncillos, ya que el pijama está en mi cuarto. Me tumbo a su lado para dormir, aunque no consigo hacerlo por bastantes horas.

Cuando acababa de dormirme me tengo que despertar para llevar a Shinnosuke al colegio. Bufo y veo como finge estar dormido para que me dé pena despertarlo e ir a clase. - Shin-chan, vamos, tienes que prepararte para ir a clase empiezas a las 8 y media. - se sorprende porque lo llame de manera cariñosa y me abraza. No parece shockeado por lo de ayer. - Levanta de la cama. - le ataco con cosquillas en la tripa y el cuello que le matan y rompe a reír.


Me visto con las ropas de ayer y subimos a nuestro cuarto. Nos alistamos y compruebo que lleve su cartera. Bostezo yo más que él, no estoy acostumbrado a madrugar. - voy a llamar a Cloud, a ver si está disponible para acompañarnos. - ayer no parecía nada bien, de haber estado de pie y sin esa cara de estar a punto de vomitar le hubiera dado una bofetada. - NO! - miro a Shinnosuke sorprendido de que grite y más que rechace a Cloud, pero esa escena le ha hecho pasar de un alucinante compañero de juegos a alguien peligroso de esos que tu madre te avisa que evites en la calle. Cierro el móbil y le empujo para que se limpie la cara antes de desayunar. Come con apetito y luego se cepilla los dientes, revisa su cartera después de que lo hice yo y aviso al chófer para que nos venga a buscar. Viene alguien de seguridad con nosotros y nos subimos.


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no quería dejar que Shinnosuke viniera solo, pero ver a mi madre no s algo muy alentador. Le he suplicado a Shinnosuke que no le dijera lo de Cloud, ya que no me dejaría verle más. Me pregunta que pasó y le digo lo que le diría cualquier hermano mayor, que se lo explicaría cuando fuera mayor con la esperanza de que lo olvide. Al salir del coche en las puertas del colegio hay cantidad de madres y niños por allí. Pronto veo a mi madre que arranza a Shinnosuke de mis brazos sin dejar despedirme. Mi padre viene detrás de mi amdre sin comprender su angustia. Habla conmigo un rato y luego me despido de él diciéndole que se despida de mi madre de mi parte. Subo al coche y vuelvo al hotel donde mientras trabajo con los ordenadores llega Cloud y su amiga.


Les abro la peurta y les indico que se sienten. Mi mirada hacia Cloud es severa y seria, cruzo una pierna sobre la otra al sentarme. - Quiero un informe de lo que ocurrió. - antes de regañarle y juzgarle quiero oír la historia.

Le pido que me informe y solo me suelta excusas.- las excusas las quiero después del informe no antes. Quiero saber que pasó, cuando pasó y cómo paso. Si hay algo peligroso quiero oír todo lo que sepas. qué es ese complemento? una droga? - frunzo el ceño al recordar algo de mi pasado que tiene que ver con una droga llamada cristal.


- No quiero secretos, estoy de acuerdo en que tengas tu vida privada, pero si me afecta directamente es el momento de hablar, Cloud. Si ese hombre es tan fuerte como tú debes de conocerle, incluso tener relación con él. Ayer puse a mi hermano en peligro y alguien intentó secuestrarme o matarme. Deberías haberte encargado de algo así sin problemas, pero te presentas en ese estado, sí, deplorable es la palabra, con pinta de haber matado a alguien. Te das cuenta de mi posición? Intento comprender tu posición también, pero no me dejas.

¿cristales de materia? Nunca he oído de algo así, aunque ni siquiera sé que aspecto tienen la mayoría de drogas, supongo que estar por encima de la gente normal me ha separado de ello. Le escucho bastante tenso, porque parece algo surrealista todo, pero la cara de preocupación de Cloud me dice que esto es muy serio. Siento vibrar mi móbil todo el rato, debo de estar recibiendo mensajes de todo lo que ocurrió, del cadáver, y tantas otras cosas que no sé.


Descruzo las piernas abriéndolas y apoyo mis codos en las rodillas inclinándome hacia delante y uniendo mis manos sobre mi boca cubriéndola. Le miro cuando se traba. - está bien, Cloud. Te creo. - digo sincero, aunque mi respuesta me parezca surrealista. Me levanto y apoyo una mano en su hombro comprensivo. - Tómate el día libre, es una orden. - menciono antes de que empiece a decir que si no le he escuchado. - Ahora no estás centrado, has visto morir a un hombre y anoche sufriste un shock. Descansa, llevaré seguridad, no me pasará nada de día en el trabajo, es mi territorio. - miro a tifa que se ha mantenido al margen. - Gracias por ocuparte, se te pagará.


- Gracias por contarme. - bajo la mano de su hombro y agarro un maletín saliendo por la puerta. Necesitaba saberlo, que estoy en peligro, para alejar a mi familia de mí. Después de todo para eso me ocupo de la empresa. Para alejar a Ren de este puesto peligroso y que pueda pasar tiempo con mi madre y mi hermano. Muchos creen que quiero hacerme con la empresa y es así, pero no por avaricia. Ya que debo estar solo al menos me gusta creer que tengo una misión, un sentido para estar aquí y ahora...