Nuevo amor, nuevos dolores de cabeza priv-Kunsel

(perdun tuve que salir)

- si... te ganarán mis chocobos... - dice sonriendo y acaricia el copete de uno de los pollos aquellos, miran a los caballos con curiosidad - creo que se los quierne comer - dice divertido ante la cara de Ethan - broma... - le enseña la lengua

- Ya quiero esta pierna bien... - se tira en el pasto con cuidado y los pollos se le suben - vaya... creo que huelo a Wutai jajaja

- será porque no serán rivales para ellos. - digo sonriente y le saco la lengua.


Los ato en un lugar cubierto y les doy de comer algo de forraje y unas manzanas. - cómo debería llamaros... ? - miro a los animales y les pongo los primeros nombres que me vienen a la cabeza. - tú Apolo y, Dorian. - señalo al blanco primero y sonrío. Los acaricio, son muy dóciles y cariñosos, espero hacer que crezcan bien.


Vuelvo a pasar por donde está mi amante con los chocobos y entro en la casa. Salgo de nuevo con dos vasos de limonada con hielo. - ten. - me siento a su lado y le tiendo uno de los vasos.

- Gracias - mira a los pollos y bebe algo de agua - es verdad... necesitamos nombres para ustedes.... siendo pareja... les pondría Cloud y Tifa pero no sería apropiado . dice divertido, realmente no soy bueno para los nombres... no sé como llamarlos.... - le mira

- Tu como les pondrías? tu eres bueno para los nombres...

- soy bueno para los nombres? - digo como si fuera un descubrimiento.


- Pues ... no sé... Duende, Fausto, Duque... Catherine, Kay, Gwen... te gusta alguno? - digo y me bebo la limonada de un trago. Cuando los pollitos me dejan sitio me apoyo en el pecho de mi amante.

- Mmmm - mira a los pollos acariciando el cabello del mayor con suavidad - vaya... muchos nombres... y poca imaginación que tengo para verlos con alguno... y si les ponemos pollo uno y dos? - dice con un tono enserio pues estaba algo indeciso

- Qué más animales traeremos?.... los akita dijo Rude que él nos los quería regalar

- harry y Hermy. - digo mirando a los pollitos y beso la mejilla de mi amante. - ya se te ocurrirá alguno.- me rio cuando dice sus nombres y niego con la cabeza divertido.


- Unas gallinas y un gallo, quiero huevos de corral. Y un par de cabras u ovejas. Podríamos intentar hacer queso un día. Y creo que ninguno más... una vaca es demasiado grande y cerdos no nos sirven de mucho, no?

- Además que son muy grandes y no tenemos mucho terreno como para una granja como tal... unos conejos.. son ... agradables... por mi traería algunos de wutai pero son enormes para este abitat... además que no les veo caso traerlos... - se recuesta totalmente

- Quiero.... tambien... un arbol de manzanas de Banora le pediré a genesis que me venda algunas semillas

- lo sé. - sonrío cuando se tumba del todo y me acurruco un poco más sobre él.


- Ya tenemos semillas. No trajiste una caja de manzanas? Podemos usar las semillas de esas. El árbol tardará en dar frutos, había pensado en ponerlo cerca del lago, cuando creciera en primera tras el deshielo lo regaría de forma natural y daría una sombra estupenda tras unos años.


- jaja, ya tienes tus chocobos, no traigas más animales de wutai, que los del pueblo van a creer que es brujería. Unos conejitos estarían bien.

- Oh pero míralos... son tan bonitos... - los pollos andaban sobre Kunsel sin molesta<r a Ethan - me adoran... jajaja atraigo a los rubios - dice acariciando su cabello

- Tengo hambre...vamos a la casa a comer algo de acuerdo?... - se levanta junto con él - se me antoja algo de fruta, qué tenemos?


(salgo y regreso en unas horas :3)

Rio cuando dice que son bonitos. - son monos a su manera... - digo mirándolos y luego miro a mi amante sintiendo esa suave caricia. E inflo las mejillas cuando dice que atrae a los rubios. - sí... ahora tendré que sufrir de nuevo esa tortura. - hago una pedorreta en su cuello.


Nos levantamos. - Pues tenemos frutas y verduras. Haré una macedonia, es fácil. - le aseguro y le tomo la mano mientras anda con una sola muleta.

- Oh perfecto¡ - dice caminando a su lado y al llegar se sienta a la mesa

- Falta poco para poder comenzar una vida normal... - le mira detenidamente, le gustaba verle mover de aquí a allá, mira el reflejo de su rostro en uno de los cristales de la cocina - vaya... con algo de maquillaje no se me verá nada... - sonrie - ya no soy un fenómeno... odiaba esas miradas en la gente...

Corto algunas piezas de frutas en un bowl y luego recuerdo algo que tomé una vez que me pareció delicioso. - te gusta el yogur y la miel? - digo y saco un poco de ambas cosas para hacer una prueba. La pruebo. - mmm... está rico, el contraste es bueno. Prueba tú también. - digo dándole una cucharada de la fruta con yogur y miel.


Sirvo la macedonia en dos platos y espero a que me diga si le gusta así para echarle yogur y miel.


Me inclino besándole. - sí, ya no queda nada. Quiero correr contigo.

- Mmmm sabe bien - le sonrie y besa sus labios.

- Ya falta poco¡... me dijo Ciel que debo usar bastón unos días, que no solo camine sin las muletas porque tengo que acostumbrar el pie poco a poco...tallaré un baston... que opinas - toma el plato con la fruta con miel comenzando a comerlo

- Que rico¡¡... me agrada, gracias cariño

- Bien. - digo sirviéndole también la miel y el yogur.

- Opino que los pinos de la parte de atrás tienen madera resistente y fácil de trabajar.

Me rio ante su muestra efusiva de gusto por la comida. - es por los alimentos, las frutas se las compré a un granjero al igual que la miel. Sería bueno tener un huerto, cierto? Pero siempre que plantábamos lentejas en algodón en la escuela se me moría. - digo pensativo.

... semorían tus lentejas? - suda una gotita

- Amor... si tenemos un huerto lo atenderé yo... - mira los morros de Ethan y rie - jajaja lo siento... pero... que las lentejas se mueran... es...raro... - dice divertido

- Compremos abejas...

- La planta se marchitaba antes de dar una lenteja, realmente... a veces ni salía brote... muchas veces pensé que se me había olvidado colocar la semilla entre el algodón.

-¡No es tan raro! - digo enfurruñado.

- eh? También abejas? sería estupendo tener dos colmenas y poder echar miel natural en los yogures, pero... yo no tengo ni idea de como manejar una colmena y... caballos, cabras, gallinas, abejas un huerto y chocobos? No va a ser demasiado. Está bien para una familia viviendo permanentemente, pero nosotros dos solos...

- Podríamos... adoptar un chico más adelante... - le mira a los ojos

- Ethan... no te has puesto a pensar... más adelante... cuando estemos grandes... para quién sería todo esto?... yo adoro a Zack y a su beba... y tu a tus amigos y su bebé... pero... me gustaría formar una familia contigo... no me voy a embarazar - aclara - pero podriamos... adoptar no crees?

Le escucho impactado y tenso la mandíbula al escucharle.


- No... no puedo criar a un muchacho. - le digo nervioso. Es cierto que gané algo de tiempo, las investigaciones avanzaron y gané dos años de vida, con suerte llegaré a los 38, pero es todo lo que me dan. Las investigaciones están en punto muerto, ese tiempo es todo lo que tengo. Siempre he querido tener un hijo, pero sabía que lo iba abandonar demasiado pronto. Aunque adoptemos uno con cierta edad, qué será de él? pOR una parte podría ser algo que mantuviera a Kunsel "cuerdo" y con los pies en la tierra, y no se imagina lo feliz que me haría tener una familia con él, nunca pensé que me lo propondría ya que no le agradan los niños, aún así, por otra me parece lo peor que podría hacerle a ese niño o niña.

Le observa atento, sabía cual era su miedo.

- Tu más que nadie debes saber lo que es estar solo... Ethan... - le toma del mentón para que le mire y no desvie el rostro - dime... y lo que me respondas lo aceptaré y dejaremos el tema para siempre... no crees que es mejor tener a alguien que te ame a pasar toda tu vida sintiendo que nadie te quiso?... - toma su mano - no quiero pensar en cuanto tiempo te queda de vida... pero sé que es algo importante... y quiero... darle amor a un niño que este solo.. uno o dos... son...cosas dificiles de explicar para mi pero... no me respondas ahora, piénsalo... y cuando me des tu respuesta en verdad que la respetaré

Me muerdo el labio al escucharle y solo soy capaz de asentir cuando me dice que lo piense.


Cuando me lo permite bajo la mirada a mi plato y pincho un trozo de kiwi con yogur que no llego a comerme.

"Claro que sé lo que es estar solo y sin amor, después de todo, fui abandonado por ser un niño enfermizo y frágil, una carga. Aunque en el orfanato fui querido por las encargadas faltaba algo. Una persona que me quisiera como nadie más podía hacer, que dirigiera su cariño solo hacia mí y no hacia decenas de niños por igual. Nadie mostró nunca interés por adoptarme nunca, después de todo quién querría algo apunto de romperse? Cuando una pareja entraba a la sala de juegos, mantenía los ojos fijos en un libro, pero no lo leía, cruzaba los dedos y pensaba con fuerza : por favor, por favor, por favor; pero habían leído las fichas de todos lo niños y pasaban de largo dirigiéndome una mirada de compasión. Antes de tener 10 años, me escondía antes de que eso pasará, comencé a estudiar como loco cada hora del día que no tenía que ayudar en la cocina o en la limpieza. Siempre pensando que con ello podrías feliz solo. Con letras góticas laboriosamente realizadas y coloreadas con ceras y remarcadas con un potente rotulador negro tenía escrito sobre mi cama en un papel a cuadros : Sin inteligencia la fuerza no vale de nada. No es una frase con fuerza, pero a mí me la infundía cada día, ni sí quiera sé de donde la saqué. Y así es como he llegado hasta aquí, sin nadie que me diera lo que necesitaba, un amor incondicional sin fecha de caducidad. "

- Tengo mucho calor, voy a darme un baño en el lago. - digo dejando el plato casi sin tocar, tiro los restos a la basura y guardo la macedonia que sobró en la nevera antes de salir de la cocina. Necesito pensar digo poniéndome un bañador y sin preocuparme de tomar una toalla o cualquier otra cosa salgo a fuera con prisa.

Me hundo en el agua bajo cerca de un metro buceando espero un segundo o dos, siento mis cabellos ondular librados de la gravedad, mis piernas se mantienen en movimiento para no dejarse arrastrar por el peso que las quiere hacer flotar. Abro los ojos, veo azul y negro sin diferenciar un color del otro. Al fondo el agua está fría, arriba los mosquitos de aguas estancadas se mantienen a flote moviéndose a trompicones por la superficie del agua. No hay peces, han huido cuando he invadido su espacio.

Ahora tengo a kunsel, una persona que no ama a nadie más y eso me ha quedado claro después de que volvió a la guerra por mi culpa, si algo bueno salió de mi decisión fue que me convencí por fin de que solo soy yo para él. Abandonó a toda su gente al perderme a mí, ya no pienso que quiera más al pelinegro, estoy persuadido de que solo existo yo para él. No siempre ha sido así. Kunsel con dieciséis años, apenas un mocoso con algo de acné en la barbilla que no se notaba con esa sonrisa poco dada a mostrarse, yo con 22 años, estudiar no sirvió de mucho, la guerra comenzó, las fronteras se cerraron, nadie podía salir del país y solo entraban tropas aliadas de ambos bandos. Las universidades habían cerrado, hombres llamados a combatir o a producir alimentos para los soldados, el saber ocupaba lugar y tiempo que no se podía malgastar, dejó de tener lugar al precisar ocuparlo. Kunsel con 17 años, venía en camilla a la tienda médica, maltrecho, muy maltrecho. Me senté y le leí, alejé sus miedos, me sonrió a medias agradeciendo, apagué las luces y me fui desconcertado sin saber porque me había puesto a leerle el Decamerón a un mocoso soldado. Volvió herido de nuevo, más grave aún, más tiempo en reposo, preguntas inesperadas de su boca, el acné ya no está, aunque ha dejado unas pequeñas marcas en su piel, se sonroja y me pide que le lea. Lo hago, no sin sorpresa. Se duerme aburrido supongo, pero al día siguiente me pide el libro para seguir leyendo ya que estoy ocupado. Le miro continuamente mientras coloco etiquetas a los medicamentos. No sé que me pasa. 19 años, es soldado de segunda clase, ni siquiera llego a felicitarle, obligaciones, las fronteras se vuelven a abrir, la guerra continúa más cruel que nunca. Parte una vez y no le vuelvo a ver, ha muerto. Le quiero, ahora me doy cuenta, demasiado tarde. Quiero salir de aquí. Marcho a Japón sin billete de vuelta. Kunsel tiene 23 años, sigue vivo, soy su asesor. No me recuerda, no fui importante, es igual, está vivo. Intento que confíe en mí, no funciona, acercarse tampoco. ¿me estoy enamorando de nuevo o no lo he superado? ¿hay diferencia? Sigue siendo unilateral. Deja de serlo. - te quiero. - obtengo respuesta por primera vez, el corazón se me salta del pecho, quiere escapar, pero no puede. Demasiado bueno para ser verdad. Demasiado bueno.


Aire. Salgo a la superficie y cojo una buena bocanada, me quedo flotando en medio del lago, mis orejas se calientan por el Sol. Nado a la orilla y me seco sentado en la tierra bañado por el calor del sol. cUANDO me seco me pongo la camiseta y encuentro a mi amante de nuevo con los chocobos. - Kunsel... yo... - se acerca y me abraza la cintura, me siento más seguro. - quiero una familia contigo, quiero adoptar un niño y cuidarlo contigo, me prometes no dejarlo solo nunca? -


(lo siento, me emocioné, supongo XD)

(pense que te habías quedado dormida XDUu)

Le mira irse y no dice nada, no intenta detenerlo, sabía que debía pensar y lo dejaría pensar tranquilo, acomoda lo que faltaba en casa y después sale, le mira sumergirse, no se preocupa sabe que Ethan es bueno nadando, camina hacia el corral de los chocobos, crecerán rápido, si lo hacían en Wutai con poca comida y con cazadores cerca, lo harán ahora con comida a más no poder y sin nadie que les intente cazar.
-Hola pequeños… chocobo uno y dos… - dice sonriéndoles y las aves se acercan como si fuera su madre, se habían encariñado con el rubio de manera rápida, les acaricia esa cresta levantada que siempre le había recordado a Zack y en su defecto a Cloud, les hace cariños mientras los pollos hacen travesuras a su alrededor.

Escucha la voz del rubio y se gira a verle, le atrae sonriendo por lo guapo que lucía. Cuando le iba a decir algo escucha las palabras de su amante y sonríe de tal manera que parecía que se iba a desmayar del gusto quería abrazarlo, levantarlo y darle vueltas pero debía estar bien, debía cuidarse para esa familia que pronto tendría, le besa de manera profunda.

-Adoptemos dos… que si podemos hacerlo… - le mira a los ojos, era inevitable la muerte de Ethan antes de tiempo pero era algo de lo que no podían escapar ninguno de los dos
- Si Ethan… lo prometo… hasta que llegue mi hora… no los abandonaré – dice sincero, de forma tan firme pese al dolor que su corazón sintió al saber que se escaparía de sus manos ese hombre que había amado como a nadie en su vida
-Te amo… Ethan… te amo como no tienes idea – lagrimas de felicidad y tristeza se conjugaban en sus mejillas, le besa de manera profunda.
-Quieres… que adoptemos niños de Wutai?... – le pregunta pues sabía que ellos además de solos vivían con el miedo de un ataque militar y regularmente los reclutaban al cumplir la mayoría de edad

Antes de hablar me muestra esa bella sonrisa.


Cuando me promete que estará con ellos me quedo mucho más tranquilo. - dos? bueno, como quieras. - digo inexplicablemente feliz. Se echa a llorar y yo con él, me aferro a sus brazos en ese beso profundo. - por qué llorasahora, idiota? - digo aunque las lágrimas también corren a toda prisa por mis mejillas. - te amo, kunsel. - nada me duele más que dejarle y me levanto todos los días pensando en los pocos días que me quedan levantándome a su lado.


- sí, de wutai. - digo sin parar de llorar y escondo la cara en su pecho. CLaro que quiero salvar a dos niños de ese destino, de la guerra, de la soledad y el miedo que no se esfuma ni cuando estás dormido.

- Pero... no llores corazón... - sonrie y le aparta para besarle de manera suave, tranquila, no tenía prisa en hacerlo ni tenía prisa en separarlo de si mismo, le fascinaba tenerle tan cerca

- Eres tan bello... me encnatas mi amor - vuelve a besarle

- Diablos... aun faltan algunos días me moriré de abstinencia - dice sonriendo divertido esperando que su amante sonriera tambien

- si has empezado tú. - digo intentado dejar de llorar, pero cuando consigo parar las lágrimas estas vuelven a mis ojos como un tsunami.


Sus besos acaban calmándome poco a poco y sonrío abrazándole cuando menciona su abstinencia. - sabes? no... no tienes que abstenerte. - puede que no podamos hacer el amor, pero si darnos un poco de calor humano y desfogarnos.

- Oh,,, mmm me parece interesante... qué propones? - pregunta a su oido mientras comienza a besarle en el cuello de manera coqueta

- Ouch¡ - dice de pronto pues uno de los chocobo le pica la pierna como intentando alejarlo de Ethan

- ¬.¬... acaso...el pollo 2 está celoso? - pregunta y el chocobo le miraba con atención, no perdía de vista, iba a volver a los labios de Ethan cuando el grasnido del pollo le separó

- Jajajaaja vamonos o aquí nos come - dice caminando con Ethan al interior de la casa, en la cual solo con pisar dentro vuelve a atacar sus labios