Habitación de Amy

Sonríe algo sonrojado, dejando que un ligero gemido escape de sus labios mientras sale de su interior.
- parece que sí me llenaste... pero no del todo... *Sonríe y se acomoda a su lado mirándole* ¿qué vamos a comer? lo normal... como humanos, por ejemplo... *bajó su mano al miembro del vampiro y tomó parte de su semen y se lo lleva a los labios* leche... *Sonríe*

Aquel vampiro era algo dificil de predecir, a veces serio, duro, malvado, pervertido... y ahora tan tranquilo y suave... igual el sexo le relajaba y era por eso.

- ¬¬ *le mira mal* me refiero a que como COMO los humanos, no a los humanos *explica* rara vez como almas... son dificiles de obtener y no todas saben bien... *le mira* asi que como comida humana, pero no a las personas ¬¬

Le da un pequeño codazo en las costillas.
- y el goloso y pervertido aquí eres tu vampirito... *sonríe*

Sonríe divertido por la actitud algo inocente y debil del vampiro, aquello era gracioso de ver, un hombre siempre serio y sexy ahora como un niño... era divertido. Se ruboriza ligeramente al escuchar esa confesión.

- yo... am... *nervioso* es la primera vez que estoy así con alguien... no sé exacatamente qué es... *siendo ángel no le habían enseñado a amar a otro que no fuera Dios y a la humanidad en general, pero aquello era mucho mas diferente* pero... me siento bien contigo y no me refiero solo al sexo *Aclaró*

Miraba al vampiro, era una situación algo extraña, tener que estar con otro en la cama, alguien que fuera activo, al que le hubiera dejado hacerle suyo y que además no fuera solo sexo o algo esporádico... todo aquello era nuevo y aún no lo entendía del todo, pero mientras no fuera algo malo o que le hiciera sentir mal, seguiría metido en ello.

- pues... espero que no lo sigas siendo *le mira* o al menos yo te lo pondré mas dificil... por muy anciano que seas Vampiro *le sonríe* soy un dmeonio, no un humano cualquiera

Aún se sentía raro eso de que alguien se corriera dentro suyo o que sus piernas estuvieran algo temblorosas por lo excitante.

Aquel tipo no hacía mas que picarle o molestarle llamándole ángel, sabía qu elo hacía con intención de molestar, pero no debía ofenderse. Le miró sonriendo al ver como terminaba por quedar dormido, se levantó como pudo a la ducha para relajarse en el agua, poues el vampiro dormiría por unas horas.

No había hecho nada en especial, pero aquel vampiro llevaba días sin alimentarse bien y con su sangre le había satisfecho, además había hecho que le afectase para relajar su cuerpo. Dormiría por unas horas, así al despertar su cuerpo estaría en plenas condiciones, mientras él debía aprovechar a relajarse con un buen baño y comería algo, sino puede que luego no aguantara el ritmo tan activo del colmillos que reposaba en su cama.

A parte de la habitación y el cuarto de baño, tenía una pequeña sala que servía de despacho, donde guardaba apuntes, exámenes y trabajos de alumnos.

Mientras el vampiro durmió, le dio tiempo a comer algo, atender a una reunión y volver a su despacho a repasar unos trabajos. Aquel tipo seguía dormido en su cama, habían pasado más de 10 horas... casi se hacía de noche del día siguiente.

- ya voy mandón... *se asoma y le ve con mejor aspecto* ten un poco de respeto y educación que estas en mi cuarto... no mandes tanto *Sonríe* ¿ya te despertaste, bebe dormilón?

- es hora de cenar... *se acerca sentándose a su lado en la cama, besándole suavemente* estaba por irme a cenar solo si no despertabas... eres un dormilón *sonríe con mailicia*

En verdad aquel vampiro era como un bebe o como un niño en ocasiones, su comportamiento ahora era más infantil y jugueton que en otras ocasiones cuando era más adulto, serio... y muy fiero en la cama.

- ¿te vienes a cenar o llamo para que traigan algo al cuarto?

Llamó a un restaurante de comida china pidiendo varias cosas, junto a una buena botella de vino, esperaba que eso sí lo aceptase el vampiro. Le dijeron que tardarían mínimo una hora pues habñia mucho trabajo, Amy no tenía problemas, de hecho dijo que así mejor...

Fue al cuarto de baño a por un aceite para darle el masaje y volvió al cuarto. El vampiro estaba desnudo tumbado boca-abajo en la cama esperando su masaje, quejándose de su lentitud.

- ya voy... *apagó las luces dejando sólo unas velas encendidas* tenemos tiempo... como una hora... *en interiores se puso sobre el vampiro* no te estreses...

Cogió un poco de aceite y comenzó un suave masaje en los hombros del vampiro.

Le estaba dando el masaje cuando el vampiro se removió, quedando boca-arriba.

- serás... ahora mis... *le besó agachando su cuerpo pegándolo al del vampiro* has manchado mis sábanas... *suspiró* he pedido comida china y una botella de buen vino a una bodega cercana... sé que no comes de todo... pero espero que una copa sí aceptes...

Se incorpora un poco, sentado en el abdomen del vampiro.
- no querías un masaje?

Aquel tipo podía ser molesto, sin embargo o bien era masoquista o bien idiota, porque tal y como le trataba le gustaba, y más sentir como le acariciaba y lo directo que era.

- mm... *le besó jugando con su lengua, separándose* ¿que cositas son esas? me pediste un masaje... y ahora... ¿quieres otra cosa? eres un niño caprichoso *sonrió mirando al vampiro*

No iría de fácil, no le dejaría jugar tan facilmente.

Acabó bajo el vampiro, sintiendo el aura depredadora del otro, sabía lo que queria antes de que se lo dijese, pero no se dejaría, haría del juego algo más dificil.

- oh... *notó su mano allá abajo* ¿y crees que lo vas a tener fácil? *sonrió haciendo que unas cadenas dle techo amarrasen al vampiro para sí salir de debajo suyo* oh... te molesta la ropa... eh? *sonrió con malicia tornando sus ojos negros* perfecto...

Chascó los dedos haciendo que Rauros vistiese ropa, era una especie de uniforme de policía, bastante ajustado, mientras él se ponía ropa de ladron.

- no voy a dejar que me atrapes... vampirito... *sonrió y de una palmada el cuarto se volvió otro espacio, parecía un edificio abandonado, echó a correr*

Sabía que esconderse dle vampiro sería dificil, asi que trató esconder su aura todo lo que pudo, pero luego se dio cuenta de que el colmillos podría encontrarle por su olor, ya le había marcado, d emodo que le encontraría.

Le escuchó en la misma habitación, estaba tan cerca... no le dejaría atraparle... no tan fácil. Volvió a hacer aparecer unas cadenas y cuando le tuvo sujeto, salió de su escondite.

- hasta otra... policia *sonrió y se dispuso a salir del cuarto*

Unos perros algo grandes le cortaron el paso, no le gustaban aquellos animales... y menos cuando escuchó aquello al vampiro, ¿de verdad les había entrenado para eso?

- ¿bromesa, verdad? *le miraba* les has entrenado para... eso? *le mira nervioso* esas cadenas no tienen llave, o las quito yo o las rompes... como lo que hiciste con las del cuarto... *le contesta sin moverse del sitio* ¿tienes que escudarte tras unos chuchos para retenerme? *le reta* qué debil...