[NC-17] ~~LA MARCA DEL DRAGÓN~~ (SasuNaru)

PRÓLOGO

La vida en el imperio de Konoha era conocida por la paz que había gracias a una antigua tregua entre humanos y dragones, las bestias divinas prometieron ser aliados de los dos piernas, uniendo así dos reinos forjando una alianza eterna, los dragones otorgarían a su guerrero un don especial a cambio de lealtad por parte de éstos, y los humanos ofrecieron la gema antigua, un diamante que poseía un gran poder, el cual fue colocado en el centro del castillo de las montañas plateadas ubicado a las afueras del reino, el reino Drakar, era el reino de dragones, Konoha, era el reino de los humanos, en Konoha, se formaron doce reinos, el del agua, madera, fuego, hielo, viento, tierra, metal, roca, niebla, lluvia, rio, y arena.

Cada uno con sus respectivas aldeas, dichos reinos serían dirigidos por doce guerreros y doce dragones, divididos entre espadachines y arqueros, solo una pareja era la destinada a gobernar todo Konoha, un día una arquera y un espadachín se unieron, la reina Kushina y el rey Minato, gobernaron por muchos años, hasta el día en que tuvieron a su primer heredero, este estilo de vida fue desecho cuando uno de los doce guerreros se reveló en contra, formando en secreto un ejercito para abolir a los reyes, el guerreo espadachín numero seis, mejor conocido como Orochimaru, tomó el poder del imperio tras desaparecer a los reyes y aparentemente también al heredero, y el equilibrio entre los dos mundos se perdió, al igual que la gema antigua y los guerreros sobrevivientes huyeron hacia las montañas, pero Orochimaru no contaba con una cosa, el pequeño heredero estaba aún con vida, y la profecía que se había dicho ya de boca en boca entre los aldeanos, estaba por cumplirse.



CAP 1: EL CHICO DE LA PROFECÍA






Se había despertado por la fuerte sacudida que Sasuke le dio algo asustado



-Naruto, despierta!!, ahora!!- se trató de levantar todavía medio dormido mientras él le explicaba lo que ocurría, y fuera de la casa se podían escuchar gritos desesperados, pero el rubio casi no los escuchó del todo bien, oía la voz de Sasuke tan distante y apagada que parecía que estaba a cientos de kilómetros de él, se desperezó y por fin le habló,



-no entiendo nada Sasuke, porqué vienes a despertarme a las...- se detuvo para mirar el reloj colgado en la pared, - seis en punto de madrugada, es mi día de descanso, déjame dormir- le dijo mientras trataba de volver a la cama

-no!! Naruto, que no entiendes??, no hay tiempo para dormir, tenemos que irnos, y pronto- Naruto lo miró con una mirada extraña, los gritos de afuera resonaron en su cabeza, ahora más que antes

-que pasa???-

-los soldados están aquí, vienen para llevarnos, tenemos que escapar, o nos llevaran con ellos, Naruto, yo no quiero ser un soldado de Orochimaru- Naruto se paró descontrolado, de los cajones de ropa, eligió alguna y se metió al baño, acto seguido, salió, con unos pantalones negros y una playera naranja, acompañada de una chamarra negra, tomó otras cosas y las metió en una pequeña mochila azul,

-Sasuke! Apúrense!!- gritó una voz desde la planta baja de la casa, Sasuke volteó a ver a Naruto, pero éste ya no estaba en la habitación, el azabache salió de la habitación, llamando al rubio,





“queridos padres...

Lamento haberme ido así de pronto, pero los soldados llegaron al pueblo, no sé si vuelva a verlos, quiero que sepan que los amo, regresaré cuando todo este tranquilo, y si por alguna razón, no lo hago, sepan que les agradezco lo que hicieron por mi desde que me adoptaron, no me busquen, no quiero que se pongan en peligro. Confíen en mi.

Los quiere...Naruto”





-Naruto, que haces??-

-les escribo una nota a mis padres- la dejó sobre la cama de éstos junto con algo de dinero y bajaron las escaleras lo más rápido que pudieron

-valla, ya iba a subir por ustedes- les dijo el chico moreno de ojos oscuros al igual que Sasuke

-urusai Itachi- le dijo Sasuke mientras se asomaban lentamente hacia fuera de la casa, Naruto no pudo creer lo que vio, su casa era la más alejada del pueblo, pero desde ahí se podía ver todo, casas incendiadas, gente corriendo, otra descansando muerta en el pasto, y la restante, la más joven, llevada a la fuerza por los soldados, para que formaran parte de sus líneas, sin que los vieran, corrieron hasta adentrarse en el espeso bosque que los rodeaba, Naruto se detuvo un poco, para quizá ver por última ves su casa, una casa de aspecto rústico de dos pisos, hecha de madera, como todas las demás, contemplaba aquella casa en la que creció, y rogó por que los soldados no la quemaran como a las otras, siguieron corriendo alejándose cada ves más del pueblo, porque le pasaba esto a él?, se preguntaba, porque?, todo sucedió tan rápido, hacía solamente dos semanas había cumplido su cumpleaños numero dieciséis, y una verdad le fue revelada, una verdad que aunque le dolió, también le ayudo para reforzar su amor hacía sus padres, que decidieron decirle que él no era un hijo biológico, que lo habían adoptado una noche hacía apenas hace dieciséis años, casi muriendo de frío envuelto en unas cobijas humedecidas por el agua del río, le encontraron y llevaron a su hogar, donde le ofrecieron mas que un techo y comida, le ofrecieron también amor, le entregaron un dije en forma de dragón que esa noche colgaba en su cuello y detrás de éste su nombre “Naruto”, y le dijeron que por tal motivo no le cambiaron el nombre, sus padres salieron tres días después de revelar ese secreto, tenían que hacer unos encargos de trabajo para una aldea del sur, partieron sin saber cuándo regresarían.

Ahora todo lo recordaba con gran tristeza, aun así, no podía volver atrás, tenía que seguir corriendo.


-descansamos??- les dijo Itachi, mientras reducían su velocidad, para descansar sobre el pasto frío,

-claro- respondió Naruto, como si hubiera estado esperando la pregunta desde hace tiempo, -y a donde iremos?,- apenas acabó de pronunciarlo, y el estómago de Sasuke y el suyo, como si hubieran estado sincronizados, gruñeron, -hambre??- les preguntó el rubio

-algo... esque ni tiempo nos dio de desayunar- Naruto tomo la mochila que llevaba en su espalda y de ella saco pan y un frasco de leche

-0.0 como alcanzaste a sacar esto- pronuncio Itachi, - ni siquiera fuimos a la cocina-

-n_n esque siempre tengo pan y leche en mi cuarto-

-¬¬ era de esperarse- dijo el azabache partiendo el pan

-y tus padres?? Sasuke, les avisaste que nos íbamos a ir del pueblo??-

-no-

-0.0 pero porque??-

-sabes de sobra Naruto que nuestros padres están mejor sin nosotros, ahora mismo han de estar volviendo al pueblo, creo que ni cuenta se darán de que nos fuimos- le respondió el azabache mayor-

-eso pasa cuando eres rico- se burló Naruto, Sasuke era de esas personas de sociedad, hijo de las dos personas más influyentes en el pueblo, rodeado de personas también influyentes, Naruto hasta ahora no sabía del todo el porqué el Uchiha había decidido ser amigo de él, la persona a quien nadie le hablaba, la persona de quien casi todos se burlaban por su falta de dinero y por trabajar en una taberna de mala muerte para ayudar a llevar el sustento a su casa, no lo entendía, no entendía como Sasuke podía ser amigo de él una persona sin el dinero suficiente como para poder ser de su círculo de amistades,

-a veces te envidio, Naruto- la voz de Sasuke hizo que Naruto saliera de sus pensamientos

-0.0 tu?? A mí??, por favor Sasuke no me hagas reír, a mí no me puedes envidiar nada, tú lo tienes todo a comparación de mí, que no tengo nada-

-a comparación, tienes todo lo que yo no- Naruto le devolvió una mirada de asombro y Sasuke continuó hablando, - a diferencia de mí, tienes unos padres que te valoran, que te quieren, y se preocupan por ti, a mi de nada me sirve el dinero, si no puedes tener el afecto de los tuyos-

-él tiene razón- confirmó Itachi,

-no te preocupes, ya verás que todo se arreglará con el tiempo- le dijo el rubio dándole un tierno abrazo.


Después de acabarse la leche y el pan, todavía quedaron hambrientos, aquello no les había llenado del todo sus estómagos vacíos,

-teme.. no respondiste mi pregunta, a donde iremos??, estamos solos, desamparados ToT y no tenemos ni comida ni ropa-

-no te preocupes dobe, el siguiente pueblo esta a unas cuantas horas, mis padres conocen a gente de ahí, y yo también, seguro nos ayudan-.


El camino no fue del todo aburrido, los tres platicaban o corrían jugando a atraparse o simplemente charlaban

-extrañarás la vida en la aldea?? Sasuke-

-a lo mejor-

-mmm... y tu Itachi??-

-a lo mejor-

-¬¬ tenían que ser hermanos-. Después de varias horas de caminar, se pudo divisar a lo lejos una tenue manchita entre dos colinas, era el pueblo siguiente

-ya casi llegamos- dijo Itachi emocionado

-hay un posadero en ese pueblo- pronunció Sasuke, - que es amigo de mi papá, tal ves nos deje pasar la noche y nos ofrezca de comer- paso a paso llegaron al siguiente pueblo, en la entrada, un arco enorme que decía “aldea del fuego”, les daba la bienvenida, se dieron paso a través de las calles, viendo como el sol a esas horas decidía meterse, dando al cielo tonos purpúreos, llegaron hasta una casa malgastada y un poco descuidada, en la puerta colgaba un letrero de un granjero con un azadón.

-aquí es- le dijo Sasuke a Naruto, empujando la puerta e invitándolo a pasar, la fachada de fuera era solo eso una fachada, por dentro todo era distinto, las mesas estaban limpias y ordenadas, a diferencia de la taberna donde antiguamente trabajaba, ésta era más agradable


-buenas tardes señores Uchiha- les dijo el hombre que estaba parado detrás de la barra, dándoles la mano y sonriéndoles, vestía con pantalones y una playera escondida tras un chaleco,

-buenas noches señor Jiraiya- Itachi iba a continuar hablando cuando Jiraiya -lo interrumpió

-señor Uchiha, le he dicho que no me hable de usted, dígame por mi nombre que para eso lo tengo-

-esta bien señor Jiraiya-

-Cómo que señor??, y a todo esto, y sus padres??-

-no vienen con nosotros- Jiraiya le dio una mirada fugaz a Naruto

-viene con nosotros- dijo Sasuke, -en nuestro pueblo ya han llegado los soldados, hemos tenido que escapar

-mmm, ya veo, puedo hablar con ustedes en privado??- les dijo dirigiéndole otra mirada a Naruto,

-yo... voy a sentarme por allá tebayo- dijo Naruto dándoles la espalda y se fue a la mesa que estaba debajo del candelabro que colgaba del techo, se quitó su chamarra y la colocó en la mesa, mientras él se sentaba en la silla, dejó al descubierto sus brazos torneados, no podía escuchar lo que los dos Uchihas hablaban con aquel señor, pero si pudo sentir la mirada penetrante de él

-no puede ser- dijo Jiraiya entre emocionado o asustado, se dirigió a Naruto con grandes pasos, cuando llegó lo tomó del brazo derecho viendo la extraña marca que tenía colocada en el lado interno del brazo a unos milímetros del dobles del codo,

-es un lunar, lo tengo desde que nací- le dijo Naruto, al ver a aquel hombre tan interesado en la marca de su brazo, tenía dos picos simulando cuernos dos extremidades curvadas con pequeñas ondas terminadas en picos y una larga extremidad simulando una cola, Naruto siempre lo vio como un lunar, pero estaba seguro de que para el hombre que ahora sostenía su brazo, era más que eso, en ése instante unos hombres entraron a la posada, Jiraiya rápidamente tapó el brazo de Naruto con la chamarra, y les dijo en voz baja a los tres que podían subir a la habitación donde los señores Uchiha se hospedaban cada ves que iban, y les dio unas llaves, mientras los tres subían las escaleras, Jiraiya atendía a los clientes.


En la parte de arriba habían dos pasillos a cada lado de las escaleras, dieron vuelta hacia la derecha Naruto contó, -uno, dos, tres, cuatro- su habitación era quinta puerta hacia la derecha, la última de aquel pasillo, el cuarto era enorme, con una ventana que daba hacía la calle, cubierta por una cortina roja que llegaba al ras del piso de madera, a cada lado de la ventana había un buró con un candelabro pequeño pegado a la pared, y debajo una cama

-ustedes duerman en las camas- les dijo Itachi, - yo dormiré en el sillón- dijo caminando hacía el sillón que quedaba frente a las dos camas, al final de la habitación había dos puertas

-la de la izquierda es un armario, la de la derecha es un baño- le dijo Sasuke a Naruto, ya que él estaba observándolas, después de unos minutos Jiraiya subió con una charola con la cena, que consistió en una especie de puchero, después de cenar, se acomodaron cada cual en su respectivo lecho y se quedaron dormidos.


Naruto abrió los ojos, le costó acostumbrarse a la idea de no estar en su casa, se levantó y se fue al baño, cuando Sasuke se despertó, el sonido de agua en el baño, y la ausencia de Naruto en su cama, le hicieron suponer que se estaba bañando

-buenos días Sasuke- le dijo naruto saliendo del baño, ya cambiado y seco

-buenos días Naru- Sasuke se levantó y también se metió al baño para bañarse, Naruto corrió la cortina, el sol iluminó el cuarto, Itachi se revolvió en el sillón, todavía deseaba seguir durmiendo, por la postura del sol, eran más o menos las diez, cuando todos se hubieron aseado, los tres bajaron, Jiraiya cocinaba algo que olía muy bien


-buenos días Jiraiya -

-buenos días muchachos, quieren desayunar??- se sentaron frente a la barra mientras Jiraiya les ponía un tazón de caldo de pollo enfrente, el vapor les llenaba los pulmones de un olor delicioso, comenzaron a comer,

-niño, sabes lo que significa... la marca de tu brazo??- le preguntó

-0.0 significa algo??? Tebayo-

-por supuesto, es la antigua marca de los guerreros dragón-

-de los que??- preguntó Itachi, mientras Sasuke ponía más atención

-de los guerreros dragón- volvió a decir Jiraiya

-y eso que significa??- preguntó Sasuke

-significa que este chico, es un guerrero dragón-

-0.0 yo??, eso no puede ser, nisiquiera sé de lo que me está hablando tebayo-

-verás, hace muchos años, existía una alianza entre humanos y dragones, al sellar el pacto una marca como esa, -le dijo señalando su brazo, - apareció en los guerreros, gracias al gran dragón Supremo, un dragón que gobernaba a los demás dragones, eran trece guerreros en total, cada uno con un dragón, así, los dos reinos, el de humanos y el de dragones, se uniría, acordaron que una pareja de guerreros y una de dragones reinarían todo Konoha, el reino de los humanos, y todo Drakar, el reino de los dragones, evitando así guerras, se formaron otros doce reinos que serían gobernados por los otros doce guerreros, -se detuvo para tomar un sorbo de sake, - y doce dragones, pero un cierto día uno de los guerreros traicionó a los otros, y se desató una guerra de donde ambas partes se derramó sangre...

-y eso qué tiene que ver con Naruto??- pronunció Sasuke

-todavía no acabo ò.ó, que impaciente son, después surgió una profecía, en la cual, reaparecería el legítimo portador de la marca y restablecería la paz nuevamente- Naruto rió un poco

-eso es una locura, porque cree que yo puedo ser esa persona??, nisiquiera se cómo son los dragones, o si existen tebayo-

-claro que existen-

-pero no puedo ser yo, usted se equivoca-

-mira muchacho, te haré una pregunta, solo una, si tu respuesta es si, entonces aceptaré que estoy equivocado y aceptare la idea de que solo es coincidencia que tengas la marca... pero, si tu respuesta es no, entonces tendrás que aceptar que eres el chico de la profecía, ¿de acuerdo?- Naruto asintió con la cabeza, -los señores con los que vives.. ¿son tus padres biológicos?, Naruto abrió los ojos y una extraña sensación le invadió el cuerpo, bajo el rostro, clavando la mirada en su tazón ya vacío

-eso supuse- dijo retirando los platos y dejando en su lugar una taza de café caliente

-bien entonces qué es lo que debo hacer??- pregunto Naruto

-quieren saber la otra parte de la historia??-, los tres asintieron, -bien, los guerreros se dividían, seis eran arqueros, y seis espadachines, sólo uno podía tener los dos dones, y ése eres tú, tu madre era una arquera excepcional, y tu padre era un espadachín de los mejores, después de tu nacimiento se supo que serías el próximo gobernador de todo Konoha, y el traidor, Orochimaru, mandó a asesinarte, tu padre al igual que muchos hombres peleó contra él, pero desapareció después, y tu madre huyó contigo, desafortunadamente encontraron a tu madre muerta a las orillas del río, y de ti no hubo rastro, Orochimaru supuso que algún animal te había matado, después se supo la profecía, y Orochimaru comenzó a buscarte, pero nunca te encontró, él sabe que eres su destrucción, por eso quiere acabar contigo-

-usted cómo sabe todo eso??- preguntó con gran interés Itachi, el hombre descubrió su mano derecha y ahí estaba, justo donde Naruto tenía su marca, él tenía una idéntica

-porque yo soy uno de los guerreros, soy un espadachín, el numero cinco, y tú Naruto, eres el número uno, el descendiente de Kushina y Minato, el heredero al trono, que reinara sobre todo Konoha,- a Naruto le latía el corazón fuertemente, no supo qué decir.