Cazador cazado (priv.)

Hacía un par de semanas que había tenido aquel encuentro con el Vampiro, le molestó haber tenido que perder su virginidad de aquella manera tan violenta y con aquel tipo, sin embargo ahora ya no podía dar marcha atrás en el tiempo. No podía tampoco abusar de sus alumnos o le echarían de la escuela, asi que decidió ir de copas al bar del Burdel, donde si la noche se ponía interesante, había muchos chicos con los que jugar.

Sentado en la barra pidió un cóctel, observando a los chicos jóvenes que allí estaban. Todos parecían apetecibles.

Esa era su esencia... le había marcado asi que no podía estar equivocado, podía percibir su presencia desde aquella habitación, el Burdel era uno de sus lugares favoritos, y no solo por el sexo, eso lo podía obtener en cualquier lugar con quien quisiera, pero la mayoria de los que iban a esossitios eran escoria que no serían extrañados por nadie si desaparecieran, justo hacía unos minutos había devorado a un par de protitutas y se había acostado con tres chicos que tambien le habían alimentado, los cuerpos estaban desperdigados por la habitación.

- No creí que un angel frecuentara estos lugares - sonrie vistiendose para ir a por aquel pequeño demonio que le incitaba tanto, baja y lo observa, un par de muchachos le rodeaban, seguramente querían tener diversion esa noche, llama a un camarero y dandole una propina le susurra algo al oido

- Señor... le mandan esto - una botella de buen licor frente a los ojos del angel caido - y esta nota - le extiende un papel con un numero de habitación

Estaba sentado degustando su copa cuando un par de chicos a los cuales había puesto su ojo encima, se le acercan diciendole que podrían pasar un buen rato, que le invitarian al paraiso... y le ocmentaron los posibles juegos y placeres que le darían... Un trío se le antojaba divertido y más viendo lo jovenes que eran, recien cumplían la mayoría pero su rostro podría engañar. Estaba por aceptar el trato pero entonces alguien se le acercó con ese regalo...

Era un licor caro, muy delicioso, sí, pero caro... solo uno de los prostitutos más veteranos podrían permitirse tal lujo, luego no sonaba nada mal, asi que curioso y deseoso se presentó en la habitación que le había dejado en la nota.

Al llegar llamó y se enocntró con la puerta abierta de modo que entró sin más, viendo aquella habitación, en tonos negros, con velas rojas... era una habitación sofisticada y muy erotica, debía ser un chico veterano... Cerró la puerta y entró un poco más, a penas se veía nada, lo cual lo hacía mas excitante, pero... una vez estuvo unos segundos en su interior sintió un aroma ya conocido.

- no... *susurró dándose cuenta de la trampa, dejando la botella por ahí dispuesto a salir*

Se dio la vuelta mirándole, era el ultimo al que desearía ver, pero para colmo parecía que estaba marcado o algo así, le había olido y le había hecho ir hasta él, ir hasta la trampa.

Su aspecto dejaba ver lo que había estado haciendo el las ultimas horas, sexo, sexo y más sexo... seguro que su apetito no se iba con un chico ni con dos... Pero por como le miraba supuso que aún no estaría saciado y él era su siguiete presa.

Tomó la copa bebiendo un poco.
- no soy un angel *bebe* lo dejé de ser hace tiempo, ahora soy un demonio y me apetecía jugar un poco... no creo que seas quien para hablarme de moral y esas cosas... *le miró* por lo que veo... ya has tenido una buena tarde... asi que no entiendo el motivo para que me hayas heco llamar...

Se quedó quieto en el sitio, no queria aprentar estar asustado, pero algo nervioso si que estaba.

Se quedó allí de pies, si se hacia el fuerte, si no le dejaba ver sus nervios o su miedo, puede que el vampiro perdiera interes en él y así le dejara en paz. A muchos le resulta atractivo aquellos que se hacer derrogar o dificiles, pero si el pasaba de él o simplemente se lo daba todo como quisiera puede que saliera vencedor...

Sus pensamientos se rompieron con sus palabras y al sentirlo tan cerca, tanto que le estaba tocando.
- no toques sin pedir permiso vampiro... *le miraba* podrías acaso darme tu nombre? *ni siquiera sabía quien era, habia tratado de buscar informacion pero no había manera*

Se apartó ligeramente cuando sintió su lengua, mirándolo mientras bebia un poco, el alcohol no le hacía mucho efecto si no bebia demasiado, se debía a ser demonio, ya que al ser ange no se bebia. Y hablando de nombres, el suyo era neutral, sonaba incluso a chica, eso se debía a la asexualidad de los angeles.

Aquel tipo estaba bebiendo más que él, no supo si lo hacía a menudo d emodo que no podía adivinar si se embriagaría o simplemente estaba jugando con él. Su mirada era intensa, no podía apartarla de él ni aun cuando apagó una vela, lo cual no le gustaba, dejar demasiado a oscuras el cuarto le daba ventaja al vampiro, ser que vivía por la noche...

- ¿como...? *se sorprendió al escuchar su nombre de labios del otro, sintiendolo al poco en su espalda, junto a él... rozándole...* mm... *suspiro al sentir como se rozaba contra su trasero* no tengo porqué ofrecerte nada a cambio... tu ya sabes el mío, es justo que yo sepa el tuyo... *se alejó de él mirándolo y apoyando su copa en una mesa cercana*

Podía intentar irse o simplemente hacerse el fácil, pero ahora esas opciones no las manejaba. Quería su nombre, quería información y el ser fácil no era su estilo, de modo que tendría que aguantar un poco más... solo un poco mas.

Le escuchaba y negaba por dentro todo lo que le decía el colmillos aquel, él era demonio, ahora tenía libertades que no tenía de angel, de modo que disfrutaba haciendo cosas varias, disfrutaba del sexo y eso no era por aquel vampiro...

- no es por tí que me apetezca sexo... no te creas tan importante colmillos... *le miraba aun cuando se apagó la segund avela* no gritaré tu nombre, ni loco, pero quiero saber quien es el desgraciado que me lo hizo... nada mas... ¿o es que tu nombre es tan valioso o temeroso para ser escuchado? *le miraba asegurandose de que no fuera por detrás para sorprenderlo de nuevo*

Estaba nervioso, pero también algo enfadado de haber sido tan ingenuo y caido en aquella trampa. Esa noche no sería así, había llevado algun arma en su abrigo... Esta noche no sería fácil, no sería como la otra vez.

- pues si solo es un nombre ¿porqué no me lo dices? *le miraba mientras se sentaba*

El vampiro se sentó en la cama, quieto allí, mirándolo sin hacer nada más... ¿acaso le iba a dejar irse si él quería? aquello era raro, demasiado bueno para que fuese solo eso... pero si se quedaba más tiempo solo por sacarle un nombre podría ser peligroso... se podía meter en líos... Debía huir de allí ahora que tenía la oportunidad, no podía pensar en ese tipo ni el lo que pasó la otra vez, él había ido al burdel para satisfacerse, para acostarse con chicos, no para que le hicieran suyo.

- bueno.. visto que no me dices tu nombre... me iré... *le mira* que disfrutes de la noche colmillitos... *se dirigió a la puerta y llevó su mano al pomo de la misma para abrir... sin embargo* amm... mm... *se llevó una mano al pecho mientras la otra se apoyaba en la pared, su cuerpo empezaba a calentarse, su respiración se agitaba* que... que me has hecho? *le preguntó de espaldas a él* ¿has puesto algo en la bebida?

Suspira tratando de calmarse, calló de rodillas al piso sintiendo como su cuerpo se calentaba, tenía que hacer algo para evitar aquello... Cuando escuchó los pasos y se volteó un poco, susurró un ligero "no" al vampiro, no quería que lo tomara de nuevo, tendría que haberse ido antes, ahora ya era tarde para evitar lo que iba a ocurrir.

- no... *se removio en la cama, observando como se echaa sobre él y lo besaba, se resistía pero ambas lenguas se lamían entre sí, jugando de boca en boca, hasta que rompió el beso para tomar aire* no me toques... estarás sucio... *sabía que había estado con otros* y... no quiero hacerlo... *le miraba, ruborizado por el calor que se extendía por su cuerpo, pero dispuesto a sufrir si era necesario* no me toques...

Aquel tipo había estado con varios, no quería que le tocara y para colmo el colmillos aquel estaba ganando todo, sabía quien era, sabía ocmo localizarle, sabía como hacer que cayera ante él y llevarle a la cama, y sin embargo Amy no ganaba nada...

Se resistía a ser desnudado, mientras escuchaba la palabrería del vampiro.
- sí... mi cuerpo te desea... *dijo enfadado consigo mismo pese a que fuera cierto* pero eso es porque me has hecho algo... ya... ya que mi mente no te desea... *lo cual era cierto, contra su voluntad su cuerpo se excitó sin saber el porqué*

Le miraba enfadado por aquello, pero con un ligero rubor, ya a penas con ropa, solo con los interiores. Al removerse sintió el miembro del vampiro y se detuvo nervioso. Recordó lo que pasó la otra vez, y lo que de seguro le haría ahora no podría ser muy diferente a lo de la otra noche.

- no... usas trucos porque... *le miraba* porque sabes que... *suspiraba agitado* que por voluntad propia... no... no vendría a ti... verdad? *sonrió* puedes domar mi cuerpo... pero no mi mente... *mordió su labio cuando intentó besarlo de nuevo*

Miraba al vampiro, y era obvio que lo unico que le interesaba era hacerle caer, hacerle suyo y disfrutar de su cuerpo, nada más... no tenía ya argumentos para tratar de oponerse a aquel tipo, no sabía qué hacer... Las manos de ese tipo vagaban por su cuerpo, entre sus piernas acercandose peligrosamente a su miembro desnudo, a disposición del vampiro.

- no... *lleva las manos a las del demonio, para evitar que le tocara* ahhh!! *gime al sentirlo allí abajo* detente... maldito... bas... bastardo... no... *arañaba sus manos, oponiendose*

No queria que le volviera a hacer sufrir o que le rompiera como la otra vez, pero... aquel tipo a parte de su aura sensual y provocadora, le intimidaba un poco, le hacia sentir debil y vulnerable... Esquivaba su mirada, la cual le hacía caer aún más en aquel juego, pero aunque mirara al restod el cuarto... a penas se veía bien, pues un par de velas se habían consumido.

Suspiraba sintiendo sus manos, removiendose y negando con su cabeza entre aquellas suaves sábanas que le cobijarían mientras el vampiro le hacía suyo. Se quería negar pero el calor en su cuerpo el pedía más, quería que le hiciera suyo tal y como le decía el vampiro.

- mm.. ngh... *se quejó cerrando los ojos al sentir sus dedos* mm... nadie... *suspiró haciendo referencia a que nadie mas le había tomado, solo el vampiro y solo una vez, de modo que era normal estar tan estrecho* ahhm... *gimió al sentirlos ambos dentro, moverse ligeramente* pa... para...

Se mordía el labio inferior mientras le miraba, observando su cuerpo, esta vez desnudo por primera vez, era un cuerpo muy tentador, llamaba al pecado y él estaba cayendo como un dulce niño ignorante... aún tenía mucho de ángel y eso le molestaba, quería cambiar, pero no así, no a traves de eso... Aquel colmillos le deboraría de nuevo, y aunque fuera placentero le daba rabia haber caido en su trampa.

- vampiro... parate... *suspiraba con la voz algo excitada*

Ese maldito no estaba por la labor de detenerse, sino que disfrutaba del juego, de hacerle caer, de dominarlo... le pedía que rogase, él jamas rogaría, no quería caer tan bajo, si quería hacerle suyo que lo hiciera de una maldita vez, no iba a alimentar su ego, pero...

- lo haré.. *le mira* mmgh... *gimió al sentirle en su cuello* lo haré si... me dices tu nombre... *quería saber su nombre, tenía esa curiosidad desde el día en que se vieron, quería saber quien era aquel vampiro*

Suspiraba abierto de piernas, como el vampiro entre ellas, sintiendo su duro miembro rozarse y hacer presión en su cuerpo, quería penetrarle, hacerle suyo de inmediato, sin embargo quería retrasar ese momento todo lo posible, estaba nervioso, temeroso de sufrir como la otra vez.

- ¿acaso no quieres... oirme... gemir tu nombre...? *lo decía para ver si al final le daba ese dato*

Esperaba que funcionara, que le diera el nombre sin embargo sintió como se apretaba ocntra él, y como finalmemnte entraba en su interior... Esta vez estaba algo dilatado, pero aún asi era grande, no pudo evitar estrecharse y arquear su cuerpo por aquella sensacion.

- mm... ahhh!! *gimió con fuerza cerrando los ojos, agarrandose a las sábanas* ahhh!! noooo... mm... ahhh!! *se movía al ser embestido por el vampiro, iba mas lento que la otra vez, le estaba penetrando profundo pero con calma, sin hacerlo violento... lo cual le daba placer y no dolor* ahm... *apartó el rostro, no quería mirarle*

Las velas les iluminaban bien, era un cuarto algo oscuro, donde la lujuria parecía reinar en el cuerpo de ambos, y el vampiro sabía como hacerlo, sabía como usarle para obtener placer... Estaba cayendo de nuevo, perdiendo ante ese tipo.

- no... amm... basta... *gemia excitado*