CONFESIONARIO

Entra a la iglesia, dejando fuera al gatito que se habia encontrado de camino hacia el templo. No sabia si al padre de alli le molestaria tener animales rondando por alli.

Hace el camino relajado hasta el confesionario, sentandose en el cuarto a un lado de donde deberia ir el cura.

Suspira, con un monton de lio en su cabeza

-sentado en el confesionario abro la ventanilla- dime tus pecados y q Dios te libere

-dije suavemente a la persona q entro al recinto-

Abre los ojos un poco sorprendido, mirando hacia la ventanilla.

-Ah.. si -Susurra sin saber con cual de todos empezar. Toma aire, bajando un poco la mirada- No me he confesado desde hace.. mmm cinco años y he llevado un estilo de vida bastante... "libre"

-sonrió un poco al escuchar el tiempo q llevas sin confesarte- habla sin restricciones aquí no criticamos las actitudes de las personas solo las orientamos, habla con confianza pequeño cordero -atravez de la ventanilla apenas se veia la tez de mi rostro, el cual es joven-

Asiente tranquilo, sabiendo que solo el escuchara sus palabras.

-Pues primero... -Busca las palabras indicadas pese a que no siente verguenza de ello si le un sentimiento extraño de contarselo a un cura.- Amo a dos hombre... bueno a uno mas que al otro, pero ambos provocan cosas distintas en mi y... -rasca su mejilla- ... Aunque los amo no puedo permanecer fiel a ninguno.