FINAL DE CICLO

-su mente se nubló por unos instantes cuando vio que el subió hasta su altura, sus sexos frotándose el uno contra el otro le sonrojaba y le excitaba visiblemente, pero no solo eso para ese instante... solo existían los ojos del mayor, esos hermosos ojos color caramelo, entonces sus temblorosas manos fueron acercándose al rostro de takano y tomándolo sutilmente atrayéndolo a su boca, depositó un beso muy suave, pero largo en sus labios, su boca suave daba besos muy tiernos, dignos de un adolescente enamorado, pero sobre todo el escuchar su nombre... le hizo sentir feliz como hacía mucho no se sentía así, rodeo sus brazos por el cuello del mayor diciéndole muy bajito- hazlo... no te detengas.... -apretó los ojos y entendió que lo amaba mas que nada en el mundo-

Nuestros cuerpos juntos restregándose me incita cada vez más, pero ver sus ojos entrecerrados por el placer fijos en los míos, hablándome de él mismo y esos gestos pequeños suyos no afectan a mi cuerpo, si no que mi corazón parece que no resistirá más de ese pequeño hombre. Respondo a sus sensibles y tiernos besos.


PoR una vez... no me pide que pare, acepta que quiere esto de mí. El corazón me da un vuelco. - Yo... yo... te quiero. - le digo con una sonrisa que se torna en una pequeña risa de felicidad. Mi alma ya se ha llenado con él, ahora solo tengo que dejar que mi cuerpo muestre lo mucho que lo aprecio. Me muevo más duro contra él, no tardamos en venirnos a la vez, él de forma rápida y yo de manera más pausada aunque nada contenida. Un jadeo que ni siquiera me di cuenta que solté salió de mis labios, cierro el momento besándolo antes de abrazarlo contra mí como si sujetara mi mayor tesoro. - Ritsu...

-lo abrazó tembloroso al sentir como ambos cuerpos se llenaban de sus esencias, estaba lloroso pero de felicidad, sus corridas juntas le hizo sentir pena pero no importaba mas nada en ese instante, esas palabras de cariños que le decía el mayor verdaderamente descontrolaba su corazón-

-sus gestos y la forma en la cual sencillamente le hizo llegar al clímax fue única, una vez mas cae rendido ante el... no podía luchar contra la corriente... y Takano era un río salvaje que le arrastraba hasta él-

-lo dejó encima de el abrazándolo hasta que se quedó dormido, no lucho por separarse.... ya mañana sabría que hacer ahora solo quería tenerlo así de cerca-

No se queja de mi peso así que me quedo sobre él, abrazando esa cabeza castaña con las ropas a medio quitar y nuestros cuerpo mezclados con los fluidos corporales del otro, la cama huele al agradable olor a jazmín de sus cabellos, a lo salado de su cuerpo y en menor medida capto mi aroma eclipsado por el suyo que me embriaga.

Se queda dormida enseguida, supongo que lo cansé, su pecho sube y baja con dificultad por mi peso, pero su respiración es tranquila y sosegada. - te quiero.... te quiero... te quiero... - le susurro al oído sucesivas veces, deseando que decírselo mientras duerme le permita tener buenos sueños. Es algo bastante ridículo. Paso un brazo por la curva de su espalda pegándolo a mí y me dejo hipnotizar por todo lo que este hombre me hace sentir.

-agotado totalmente por el mayor sigue dormido de medio lado dándole la espalda a Takano, nunca había dormido tan plácidamente en largo tiempo, su respiración suave acariciándole el cuello, era la mejor atención que podía recibir, sus brazos rodeándole la mejor sabana que le resguardara del frío, y así se hizo presente la mañana el el reloj sonó justamente a las 6:30-

-apenas el sol de la mañana se coló por las ventanas, se removió dándose la vuelta y al verle a su lado dio un grito- ahhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! -se levanta todo alterado, pensó que todo había sido un sueño... y uno muy raro a su parecer-

Teniendo en cuenta que nos dormimos a las 3 de la mañana y todo el ejercicio que habíamos hecho, podría dormir 9 horas. Sin embargo con Onodera las cosas nunca salen como espero. No solo me despierta a las 6 y media de la madrugada, si no que lo hace con un grito demasiado próximo a mi oído. Esto me hace incorporarme como un resorte soltando al hombre. Le miro con los ojos entreabiertos por las legañas y con cara de pocos amigos. Miro mi reloj y aunque no consigo distinguir demasiado bien la aguja pequeña de las horas, la de los minutos marca casi 6 y la de las horas está entre medias del 6 y el 7 consigo adivinar al ver la de los minutos.


- Mmmm... es pronto... - ignorando al escandalizado hombre cojo la manta y me tapo intentando volver a dormirme. Ni idea de porque el grito, pero estamos en su casa así que no puede huir, decido dormir un par de horitas más con o sin su permiso.

Ta.. ta.. ta... ta... ta.. ta-ka...ka no san.. -se agarra la cabeza y piensa entonces "no fue un sueño.... argh!!!! y ahora que haré?", se levanta como puede y le mira con esa cara de pocos amigos y por aquella distracción no recordaba que tenía los pantalones en los tobillos y cae estrepitosamente al suelo- argh!!!!!!!!!!!!!!

-se pone de muy mal humor y lo trata de levantar- takano san deja de dormir carajo!!! grr tenemos que trabajar... aparte es la fiesta... y no tengo lista las correcciones de Motou sensei...

-replicando una y otra vez por cosas que la noche anterior ya habían resuelto, y el pobre chico con los nervios de verlo acostado en su futón se le olvidó todo-

- Mmmm... - me quejo. - No seas tan ruidoso. - mientras me mueve para que me levante lo abrazo por la cintura volviéndolo a tumbar conmigo. - Pareces cenicienta. - no tiene mucho sentido esto último que dije, solo que me pareció una buena respuesta porque al igual que a ella se le terminó el hechizo, solo que a la protagonista de Perrault se le esfumaba el vestido a las dos y a este individuo se le termina al despertarse. Bueno, me acabo de despertar, no os voy a recitar la tabla periódica.



Acoplando mi rostro al hueco de su cuello le susurro. - Tranquilo, lo haremos todo hoy. La fiesta no es hasta las 5, además si vamos con cara de sueño Isaka-san nos echará la bronca, ya que nuestro departamento es él que más miradas atrae y todo el departamento mal pensará de nosotros si no vamos descansados. y tú no quieres eso. - después de decir eso intento volver a dormir, pero no creo que el hombrecillo me vaya a dejar así por las buenas.

-pone muy mala cara al momento de escucharle como le llama "cenicienta??!" como carajos era posible que se atreviera a llamarle así... aunque eso era obvio... pues el mayor no tenía ni una gota de vergüenza ni mucho menos escrúpulos para decirle semejante cosa, podría haber sido peor, sin embargo ritsu se enoja mas y sacúde a Takano- Bakaaa!! como me llamas de ese modo!!!.
Oye!! ya es hora q vayas a dormir a tu casa debo hacer oseo y ducharme...

-se mira el abdomen y recuerda lo que había pasado, se pone de todos los colores habidos y por haber- TAKANO!!! SAN!!!!! .... -derrente le suelta en un grito- Masamune!!.... -se tapa la boca ahora si murió de la pena, lo llamó por su nombre-

- Tsk! que molesto. Luego te froto la espalda si quieres, ahora déjame dormir. - Realmente necesitamos una ducha, nuestra juerga de anoche sigue manchando nuestro abdomen. Tercer intento de dormir se ve arruinado, de forma grata, por un grito con mi primer nombre. Esto me termina de despertar y Abro los ojos de apr en par y encontrando que se tapa la boca arrepentido de lo que esta ha soltado.


- Me haces tan feliz de forma involuntaria. - lo aprieto contra mí saboreando su vergüenza en mi piel. Esto le pone más nervioso aún. - Deberías de mirarte ese complejo de bipolaridad, anoche hicimos muchos avances y estoy harto de dejar que los tires por la borda.

-el mayor podía ser tan odioso y tan... dulce al mismo tiempo, que su vergüenza no cabía en su delgado cuerpo- ah???!!Frotarme la espalda?? que carajos estas hablando ya suéltame quédate a dormir si quieres me voy a duchar -dijo luchando con los brazos del otro, que en el fondo pensaba no me sueltes abrázame mas y no me dejes ir-

-por un momento dejó de luchar y sus orejas se pusieron rojas al darse cuenta de lo que estaba pesando, y entonces se dijo a sí mismo "¿seré idiota?"-

No estoy tirando nada por la borda gran idiota .... -le dijo casi en susurros-

Como él me pide sin palabra alguna lo abrazo más aún, tocando más partes de su cuerpo con mis brazos y frotando de forma cariñosa sus brazos. Doy un beso en la cima de su cabeza castaña. - Puedes llamarme por mi primer nombre. Ni siquiera cuando eramos novios lo hacías, me hace feliz que lo hayas hecho por primera vez después de tanto tiempo, aunque haya sido para reprenderme. - mi cuerpo se adapta al suyo, nuestras piernas están hechas un lío y algunos mechones de nuestros respectivos cabellos se entremezclan sin enredarse. - Entonces no actúes como si lo de anoche no hubiera pasado.


Me quedo enlazado a él unos minutos en silencio para más tarde acariciar su hombro y decirle. - Nos duchamos juntos? Por ahorrar agua y eso.

-sus suaves caricias le relajaron solo unos momentos, y recordar que lo había llamado por su nombre le hacía sentir hecho un enredo, no entendía ni como ni porque lo había llamado de ese modo, realmente estaba un tanto confundido, le escucha hablar suavemente que le había gustado que le dijera así, aunque no sería nada sencillo volverlo a llamar así-

No ... se si pueda... la personas en el trabajo hablaran mal... y no voy a dañar nuestro trabajo ... -suspira relajándose pero cuando le escucha que quiere se duchen juntos por aquello del agua se niega rotundamente- NO!!!!!!.... como crees todo terminara en ya sabes y no quédate aquí e iré a ducharme primero

-el chico era todo un caso especial-

- Lo sé, yo solo te llamo Ritsu cuando estamos solos, sí estás bien con eso puedes llamarme Masamune, sí? Aunque ya me acostumbre a Takano-san, sobre todo cuando tú sabes. - me rio. - ¿por qué siempre piensas tan mal de mí? - digo con voz inocente aunque se perfectamente que hace bien pensando así, ya que aunque no siempre es mi intención lo acabamos haciendo. Lo giro un poco para darle un apasionado beso que lo deja un poco aturdido. Aunque no me apetezca mucho me levanto y me coloco la ropa. - Bueno, pues iré a ducharme a mi casa. - me arrodillo a su lado y ahueco su mejilla en mi mano. - Ven y desayuna en mi casa, trae el storyboard. - le sonrío antes de levantarme, me paro en la puerta. - pero que sepas que sé que te mueres porque nos duchemos juntos y por lo que te haría bajo el agua ardiendo. - le guiño un ojo antes de salir hacia mi apartamento.

-frunce el ceño ante las palabras del mayor, aunque tenía razón nunca le ha llamado por su nombre cuando estan en la oficina siempre le ha dicho Onodera, o baka... o nuevo, o algún peyorativo, suspira pero derrepente es atrapado en un beso profundo y apasionado que no le dejó ni reaccionar, que descarado era takano san como era capaz de recordarle semejante cosas, aunque en el fondo si era verdad que estaba deseando sentirlo de nuevo.... pensó entonces "me estoy volviendo un pervertido...."-

nghhhh !!! -forcejeo un poco con el beso y al separarse el otro no reaccionó solo tenía mala cara y sonrojo hasta las orejas, apretó los labios viéndolo salir del apartamento, no le quedaba de otra que ir al apartamento de Takano a comer... y si no iba seria peor... ya lo había vivido... o acaso sólo era un deja vu-

-se mete a duchar y medio recoge el apartamento, se viste para ir a casa de takano san tomando el storyboard y su carpeta, toca el timbre y viendo q no sale de una vez intenta meterlo por el buzón para emprender su huída-

Me quedo largo rato bajo el agua alternando el frío y el calor para desentumecer los músculos y despertarme. Solo vestido con unos pantalones y una toalla al cuello para ir secándome el pelo.

Después de eso me lavo las manos y pongo a cocer arroz, preparo una sopa de miso de sobre, frío unas verduras y un poco de pescado y unos crêpes con salsa dulce de judías. Lo tengo todo listo antes de que venga y ya colocado en la mesa. Me vienen flashes de la última vez que vino a comer. Sonrío travieso y cuando oigo el timbre, me quito el delantal y me pongo una camisa rojo claro para ir a abrirle.


La puerta choca contra algo al abrirla al asomarme por el borde de la puerta me encuentro con la cabeza de Ritsu y el storyboard pillado en el buzón y doblado por la puerta abierta. - eres idiota? - me duele que haga este tipo de cosas y más después de la noche que hemos compartido. Ha admitido que me quiere... por qué ahora...? Cierro los puños con fuerza antes de jalar lo hacia dentro y mirarlo con cara de mala leche. - Sinceramente... quién está jugando con quién? Solo tomas lo que te conviene de mí y luego huyes. Tsk! - digo con fastidio apartándome y yendo hacia la cocina me siento con una pierna subida a la silla todavía algo molesto. - ¿qué tengo que hacer? - le pregunto desde mi posición. - Sé que no lo he cumplido hasta ahora, pero sí te prometo que no te tocaré más de lo que digas actuarás normal conmigo? - le miro fijamente.

-se queja por el golpe que le dio, pero baja la cabeza entrando por el jalón que le da, entra a la casa del mayor y comos siempre estaba nítida y ordenada, sus palabras eran un total regaño, y aunque tenía razón, todavía era difícil admitir todo lo que paso, no le disgustaba que le tocara sin embargo, era cuestión de adaptarse, aparte que su personalidad era un caso especial, el mayor debía entender eso- ta.. takano san.. yo... no no estoy jugando... -dice en tono bajo- solo que no se como actuar ... -aprieta los puños y le grita derrepente- que no entiendes que me da pena!!!!!!!!

-suspira volviendo a comportarse como debe- lo siento... no quise gritar.... no tienes que hacer nada.. el único del problema soy yo... que no se ... ser ... ya sabes... normal... -admitiendo que tenía una personalidad retorcida y ademas de todo cascarrabias, para tener 25 años, parecía un viejo de 50-

verte a solas... me pone nervioso..

- Siempre me acusas de que estoy jugando contigo. - me enciendo un cigarro para calmarme los nervios, llenarme el cuerpo de nicotina y sostener el alargado pitillo entre mis dedos me relaja notablemente. - Pero eres tú él único que solo me busca por interés, en el trabajo intentas hacerlo por ti solo, porque parece que te has puesto el estúpido reto de superarme en ello, tenemos sexo y a la mañana siguiente me tratas como a la mierda.



Una gran humareda se acumula encima mía y me tengo que encender otro cigarro. - Claro que sé que te apena y que tienes una personalidad difícil, pero eso no te da derecho a hacer lo que haces. Estoy convencido de que estás enamorado de mí, pero a veces creo que me engaño a mismo y solo sigo intentando gustarte más y más. Aguantando tus desplantes, haciendo lo que creo mejor para ti aunque no te guste. - me aprieto el puente de la nariz con demasiada fuerza intentando frenar el dolor de cabeza que me sube desde el cuello. - Tengo que admitir que descubrir cosas de tu personalidad me fascina cada día, pero muchas veces mi propia curiosidad se vuelve en mi contra y salgo mal parado. - apago el cigarrillo que ya terminé.

-sus reproches eran claros, concisos y precisos, cada uno tenía razón, y se sentía un poco mal por eso, aunque no era intencional, era como un impulso por protegerse, aun existía el temor de quedar peor que hace 10 años, nota lo estresado que se puso Takano san, no tenía ni idea que hacer, pero derrepente sólo se le ocurrió acercarse a el y tomarle de las manos, y decir a golpe casi gritando- Aunque haga cosas que no son! y que parezca que te odio no te odio.... al contrario.... -luego suelta su mano- yo... te.. quiero -dijo por fin con palabras y de sus orejas pareció salir humo-

Siento hacerte sentir mal.... pero no se como controlar nada... -quedando a una distancia prudencial del otro, a pesar de que sabía que en cualquier momento esa sería acortada por el mayor- Olvide... como aceptar el cariño... mejor dicho el amor de alguien... no he estado .. con alguien desde que hace 10 años...-confesó-

Me sorprende su reacción, tengo que ponerme dramático para que me diga este tipo de cosas. Será siempre así? Su vergüenza llega a un grado que nunca había visto, observo cada parte de su cuerpo, en verdad, adoro analizar como reacciona y actúa. Pero esto no me basta, pensé que con que me dijera te quiero estaría satisfecho, pero necesito que me lo demuestre, hablar es muy fácil, pero le importó? se preocupa por mí? Si es así lo oculta demasiado bien. Escucho sus excusas mientras se aleja y hace otro pequeño rasguño a este corazón mío que no tiene más sitios por los que coser lo. No me sirve de nada que se me declare si luego se espanta de mí.


Me sorprende lo de que no haya estado con nadie, mientras que yo cerré mi fortaleza a cal y canto y me desahogaba con cualquiera intentando encontrar algo similar a lo que él me hacía sentir, a pesar de que siempre supe que eso sería imposible, solo podía amar así a una única persona en el mundo; él se cerró también y solo guardó su dolor y este ha crecido tanto que no le permite mantener una relación normal a estas alturas.


Aunque espera que lo ataque mi reacción es bien diferente. Hago un gesto con la cabeza hacia una silla a mi lado. - Siéntate. - con las manos juntas pronuncio. - itadakimasu. - cojo unos palillos y cojo un poco de arroz algo frío, lo revuelvo con los palillos para que los del fondo vayan hacia arriba y así poder comerlo como me gusta. Como especialmente crêpes con salsa de judías dulce, me quedo bien pienso, aunque lo que me importa es sí a él le gustará.

Su cabeza estaba dando vueltas maquinaba que estaría apunto de decirle el otro, nervioso de sus acciones, pero deseoso al mismo tiempo, queriendo que las cosas se suavizaran así su cabeza volvería a pensar claramente, pero aquello dio un vuelco muy raro, takano san... no hizo, nada miró hacía arriba buscando el rostro del otro para ver su expresión... era extrañamente tranquila... y eso... lo ponía intranquilo a el... como era posible que no le hubiera brincado ya encima??.... esa respuesta le daba miedo encontrarla-

Takano... san?.... estas bien??-preguntó cauteloso esperando cualquier reacción del otro, quizás un grito de idiota o algo parecido pero ni lo uno ni lo otro, igualmente se sentó temeroso en la mesa diciendo entre dientes- Itadakimasu... -lo miraba de vez en vez tratando que no notara que le veía pero era evidente que no sabía disimular ni de joven ni ahora lo logró-

-pensó: A quien quiero mentirle?... porque quiero convencerme de que no me ama?.... cuando lo veo no consigo entender como han pasado 10 años aquí estamos de frente a frente, ya no somos chicos.... las cosas son serias... no he vuelto amar... a mas nadie... y aunque sea verdad o mentira no puedo fingir que no lo amo-

Nunca te borre de mis pensamientos ... sólo los bloqueé... quise fingir que te olvide... pero nunca pasó.... de verdad lo intenté pero nunca lo conseguí -dijo derrepente-

- Hai. - respondo mientras sigo comiendo. Darle un margen, supongo que eso es lo mejor. Que se dé cuenta de lo mucho que echa de menos que me tome esas confianzas con él.


Escucho lo que dice y suspiro. - Borraste las imágenes, por eso te mostrabas tan incrédulo cuando te dije que era Saga Masamune, lo que siempre quedó en ti fue las sensaciones, lo que sentiste entonces, es algo que no podemos borrar. Tampoco lo olvidaste porque siempre me odiaste después de eso, cuando tienes unos sentimientos tan chocantes y contrarios hacia una misma persona no puedes olvidar la.


Dejo caer los palillos sin apetito sobre un cuento y me enciendo otro cigarro. - Puedes decir te quiero las veces que necesites para creértelo, pero si no se lo demuestras a esa persona no llegas a ella y finalmente se irá. - le miro. - En aquel entonces solo me lo decías, y yo, aunque me mostraba escéptico que alguien me quisiera sin un interés oculto, te creía. Pero el Ritsu honesto se fue. - digo con una sonrisa irónica. - No te lo pido ahora, eso es algo que solo pasa, cuando ocurre algo, una circunstancia apropiada lo haces, pero sí quieres que te crea debes demostrármelo, demostrarme que me quieres como dices.

-Todas y cada una de las razones que le daba el mayor eran totalmente válidas, tenía la razón mas que garantizada, frunce el ceño y mira a un lado, en su mente divagaron multitud de preguntas ejemplo de una de ellas era ¿como decirle " amor no te vayas quédate conmigo" y demostrárselo con hechos?, si cada noche durante esos 10 años trató de olvidarle, si... quizás odiarlo ... por creer que lo había botado como si fuese un trapo mas-

-come un par de bocados y da las gracias por la comida, y toma el storyboard, realmente en ese instante no sabía como expresarse, y último que había le salió del alma, decirle todo con sinceridad así de la nada y que el lo presionara así le enojó un poco- arigatou por la comida... vemos en la fiesta....

-no discutió nada en lo absoluto de demostrarle su amor, sabía que no valdría de nada pelearse... ahora se dedicaría demostrárselo tal y como el quería ahora en su mente corría solo una interrogante-


-se va de su apartamento sin discutir mas, y llega la noche, preparándose para salir a la dichosa fiesta que darían en Marukawa por el día festivo, sale del apartamento arreglado y trajeado se veía elegante y la verdad muy hermoso-

Spoiler:

Se va solo dándome las gracias. Me enciendo el cuarto cigarro, hoy mis pulmones no iban a estar de buen humor. Me quedo sentado con la cabeza echada atrás mirando como el humos del cigarrillo se retuerce haciendo curvas sin forma.


No me enfado por como actúa, realmente amor su forma de ser, pero no quita que esté ansioso y solo se me ocurra aprovecharme de la situación. Pienso que se pondrá traje para esa fiesta que no existe, me refería a que el día era festivo, no ha que hubiera una fiesta de la empresa ni nada parecido. ¿a dónde podemos ir que usemos traje? A pesar de todo lo que he dicho, ya ando buscando otra forma de estar con él a solas, de compartir otro momento con él. Encuentro un sitio idóneo y hago una reserva. El hombre de voz rasposa que me atiende me dice que acaban de anular una reserva de tres personas así que tendríamos una mesa. Le pido que me apunte y le doy las gracias antes de colgar.


Recojo la mesa antes de vestirme con un traje de etiqueta y, aunque no lo había planeado salimos a la vez. Nos miramos desde nuestras respectivas puertas. Se puso un traje y aunque no tenga un cuerpo muy masculino, este le queda genial. Me sonrojo mínimamente y finjo toser para poder tapar la cara.

- Te ves bien, venga, te acerco en mi coche. -

-al salir de casa justamente se lo encuentra y después de tanto pensar como o que debía hacer para demostrarle que lo que sentía era cierto trató de halagarle también, sin embargo, la timidez no le quitaría así nada mas, tenía terror de decir algo, traga grueso y obviamente se le vio nervioso y sonrojado por las palabras del mayor, pero al verlo tan guapo, elegante, además de su porte tan masculino, pensó "me encanta como se ve"-
Yo.. etto gracias... tu tu... tu ... tu -tartamudeando- tu tu.. estas... gu... -sigue tartamudeando y le costaba decirlo todo en una sola sentencia- guapo...muy ... gu..guapo ....

-camina rápidamente para que no lo le vea el rostro colorado- Si.. si te agradecería que me puedas llevar -dijo con amabilidad , mientras esperaba que el ascensor abriera sus puertas-

-se abren las puertas y entra, de a poco le miraba a través del reflejo de los paneles de vidrio que habían dentro del ascensor y vuelve a pensar "debo hacer algo"...-