¿quieres hacerme compañía? (LIBRE/que el entre sera privado luego)

-Un hombre fornido entra al burdel, su mirada intensa y provocativa atraía a muchos, los murmuros iniciaron para no cesar, todos miraban al caballero trajeado de negro, el cual tomó asiento en la barra, pide entonces una copa de escoses sin hielo, le gustaba tomarlo puro, y seco-

-bebe un sorbo y se queda mirando el líquido en su vaso, sonrió de manera un tanto misteriosa, quedándose en sus pensamientos, nadie sabía lo que podría estar pasando en su cabeza, pero lo que si era seguro... era que la humedad, y unas sabanas arrugadas estaban en ellos-

-le habla al bar tender- Quiero un pet ahora... -dijo en casi tono de orden-

Me desabrocho la camisa y me estiro en la cama, antes de adoptar una postura sexy para cuando entrase mi cliente. El barman conduce a Asami ahsta el cuarto y le informa que el Pet está dispuesto a todo y que el precio es el de siempre. Cuando entra me incorporo en la enorme cama, y más comparada con mi tamaño. Me llevo un dedo a los labios y lo muerdo haciéndome el lindo. - ¿qué puedo hacer por mi amo? - mi expresión es linda y tierna, pero con cierto toque pícaro. El cliente puede pedir lo que quiera, el cajón hay todo tipo de juguetes y en el armario mis trajes. En la nevera también hay cosas de las que podemos disponer sin pagar ningún extra. - Amo, no me haga esperar más, se lo ruego.

-Entra a la habitación asignada, observa al pelioscuro casi de forma que le desnudaba con la mirada, se echa a reír y toma asiento en uno de los sillones, comienza fumarse un cigarrillo, ladea la cabeza de manera sensual y un poco jugueton, vaya que aquella noche sería divertida tenía un pet necesitado de atención y Asami Ryuichi.. lo atendería muy a su modo-

Estas ... muy necesitado??.... -se levanta y camina hacía el y pasa sus dedos lentamente por sus labios- sabes... soy un amo que le gusta mucho jugar ... -sin reparo bajó su mano a su sexo apretándolo suavemente pero derrepente ejerce un poco mas de presión, no para que le doliera pero si para incitarlo-

Me pone un poco nervioso que se ponga a fumarse un cigarro lejos, es como si no le atrayerá.

Finalmente se acerca y no se anda con rodeos desde luego que no. - Sí, por favor,juegue conmigo, juegue conmigo hasta que le pida a gritos que pare, no, más, estoy realmente necesitado, abuse de mi todo lo que quiera amo. - digo dejando salir mi voz jadeante mientras me agarro a esa chaqueta negra y pulcra.

Estiro mi pie y lo froto contra su entrepierna. - Quiero que me empale con esto, mi amo.

-esto se pondría muy bueno a la vista del mayor, quién disfrutaba de aquella caricia en su entrepierna pero no dejaría que el menor le llevase como el quisiera y si... lo haría gritar de dolor de placer, y hasta la locura misma esa noche, no pretendía ser bueno,acaricia su pie y derrepente le atrae a el de modo súbito deja el cigarrillo de lado y arranca la camisa de éste dejando su pecho descubierto, pasaba sus dedos por los pezones rosas del contrario, el aroma de Asami mezclado con el cigarrillo le daba un aire interesante bastante masculino, su porte era el de todo un macho de verdad-

Claro que abusaré de ti... y no sabes cuanto... -le tomó el mentón y le lamió, luego besó sus labios de manera animal rompiendolo un poco-

Por fin me iba a violar un hombre de verdad, esta noch prometía, este hombre lo tiene todo en su sitio su aroma y su aura es excitante. Sería una buena noche.

El hombre me trata con rudeza, pero no puedo decir que me disguste, más bien me excita. Sabe como tocar pienso con la respiración agitada por sus caricias en mis pezones. La lamida de este es muy lasciva y ahce que me arquee, invade mi boca por la fuerza haciendo que me tenga que agarrar a él antes de coger fuerza de voluntad para responder a esa lengua que taladra mi boca.

Cuando casi no me queda respiración deja libres mis labios hinchados por ese único beso bestial. Aparto suavemente las manos enormes del hombrr dr mis botones y paso a acariciármelos yo. - Su boca... aquí... mi amo.

-esto iba a ser muy bueno, jugaría mucho con el chico, le vió a los ojos y se relamió los labios de manera sucia y lasciva, escucharle decir que pasara su boca por sus pezones fue muy excitante para el mayor, entonces se dispuso a lamer aquellos rosados botones con su lengua, pero con cierta rudeza los halo con sus dientes sin apartar la mirada del otro , su lengua recorrió el centro de su pecho hasta llegar a su abdomen bajo-

-Una vez ahí bajó los pantalones del otro al mismo tiempo se separó sus piernas acariciando tambien su entrepierna, de un momento a otro se quitó la corbata y ató las muñecas de éste a la cama- cuál es tu nombre??... -dijo suavemente pero su voz era profunda muy masculina-

-acariciaba justamente sus testiculos por encima de la ropa interior, comenzó a reir en tono un poco mas alto, el chico no sabía lo que vendría ahora, y eso le emocionaba al mayor-

El mayor es simplemente sucio, ver esa lengua que había abandonado mi boca relamerse y luego tomar posesion de mis pezones, es maravillloso, y lo que hace con sus dientes hace que gima. No pierdo de vista sus ojos, ni si quiera cuando baja por mi abdomen, hago esfuerzos por no arquearme para mantener mis ojos entrecerrados fijos en él.

Las manos con las que me agarraba a él son llevadas a los barrotes de la cama y atadas fuertemente, Así estoy francamente sexy, con las sábanas removidas, y solo con unos calzoncillos especialmente ajustado marcando mis tributos. - Como quiera llamarme, usted, amo. No tengo ni nombre ni voluntad. - mis palabras se ven interrumpidas por las caricias del mayor. - aah... - se reía agusto el cabrón alcanzó a pensar ya que sus caricias me vuelven loco y no puedo concentrarme en otra cosa que no sea su mano en mis partes. - Amo... estoy duro... tan duro... aah... - me agarro a los barrotes y a la vez que se acaricia yo muevo lentamente mis caderas incitándole a rozarme. - Es insoportable... - digo con una voz sexy y suave, dejando caer mi cabeza sobre unos de mis brazos, mi cara sonrojada por la temperatura y la atenciones del hombre se veía irresistible.

-sus poses tan sensuales le hacían encenderse de locura, pero no dejaría que aquel encuentro acabara tan en un simple acostón, jugaría con el muchísimo esa noche, sonríe perverso y aprieta su pene, le observaba con sumo misterio, entonces le susurra- Sabes me gusta jugar mucho... y hacer enloquecer a mis victimas... -hablaba como cual psicópata sexual-

-escucharle hablar de ese modo, de que no tenía voluntad solo aumentaba su ego, el mayor se quito la camisa dejando ver sus pectorales perfectos y sensuales, se arrodilló en la cama frente a el, deslizando por sus piernas la ropa interior, le observa lascivo y muy seductor, nota que esta endurecido, pero lo haría sufrir un poco más, acarició el glande de este muy apenas... provocándole hasta el extremo-

-luego siguió frotándole sin embargo se detuvo derrepente, separó sus piernas y pasó su dedo por el perineo,sin esperar mas separó su entrada frotándola con su dedo, el mayor era un tanto despiadado, pero no por ello menos sexy-

Hmm... estas mojándote -notaba su entrada humedecida-

Y tanto que me hace enloquecer. Esa voz era realmente sexy y sus palabras tan lascivas. Además cada gesto suyo está hecho para llevarme al límite y torturarme. Empieza a chuparme, pero se detiene haciendo que gima cuando dejo sentir su boca en mi miembro, lo que hace a continuación me provoca combulsiones por todo el cuerpo. - Amo... rico... - un hilo de saliva se escapa por la comisura del labio y al notar la saliva fría en mi rostro me doy cuenta de cuan caliente está mi rostro, Debe de ser un rojo muy intenso, hasta las orejas. - Amo... quiero que ... me hagas enloquecer como a nadie... - digo provocándole.

Apesar de que los movimientos del mayor en mi culo me roban el aliento alcanzo al succionar levemente su dedo. - Mi culo... se impacienta... - digo antes de morderme el labio inferior con mucha fuerza y cerrando los ojos dejando que el olor del mayor y el placer que hace que recorra mi cuerpo me invada.

-comienza a reír un poco malvado y le dice con un tono seductor- Muy impaciente tu culo??... sabes que esto apenas empieza y comenzaras a enloquecer aun mas -abre sus orbes de manera malvada y desliza dos dedos de un solo golpe y alza una de las piernas del chico pegándola a su pecho lo cual provocaba que su ano quedara mas expuesto, su dedo deslizándose de manera brusca en ese apretado culo, le hacía pensar cosas inimaginables-

-se acomodó en mejor posición y comenzó a relamer sus testículos haciendo que su pene llegara a ponerse lo mas erecto posible casi llegando al punto de dolor, estaba disfrutando de aquella escena, Asami era del tipo de hombre que jugaba rudo, entonces murmuró- quizás debería amarrarte las piernas también ...

- aaaaah! - me arqueo al máximo cuando introduce sus dedos en mí y los mueve de un forma verdaderamente deliciosa. - ah... muy rico. - digo con voz ahogada y sexy. Las variaciones en la voz del mayor eran excitantes, y los ojos malvados de mi cliente, no, de mi amo, anuncian mucho placer y perversión.
Cuando lame mis bolas tengo que encoger las piernas por el placer, sobre todo cuando mi mimebro alcanza todo su grosos. - si sigue me voy... a correr... . el cliente siempre tiene razón, así que si quiere atarme las piernas y amordazarme, pues vale, pero no sé como de divetido será para él, aunque yo me lo estoy pasando de muerte.

--cuando el escucha decir que se correrá se echó a reír malvadamente y le susurro- si te corres pagaras las consecuencias... no puedes correrte antes que yo...

-sacó de su bolsillo una especie de anillo que era un juguete sexual, para apretar el sexo de éste y evitar que se corriera, entonces se lo colocó y continuó con su atención en el falo, el cual mordía por los costados mientras sus dedos expandían sin piedad alguna su ano, su pose tan sensual y erótica comenzaba a rayar en la perversión y eso era lo que Asami quería, enloquecerlo de perversión, dejo de lamer y morder unos instantes, para pasar de nuevo a sus pezones los cuales parecían pedir sus mordidas, de hecho comenzó a morderlos y a relamerlos hasta dejarlos muy duros y húmedos-

En cuanto saca el anillo sé llo que me espera, lo he visto antes y es francamente horrible. Pensé que podría decirle que sería bueno y no me correría, pero me lo pone y siento un gran dolor con ello. De tanto morderme el labio me hago sangre, ya que mi cuerpo es manipulado, pero es imposible que me descargue de alguna manera. Además me estaba chupando muy duro, los mordicos y los movimientos en mi ano o dentro de él era de verdad insoportable. Caigo rendido cuando deja en paz la ´parte más sensible de mi cuerpo. Con la cabeza ladeada veo como chupa mis pezones, pero el dolor abajo es demasiado fuerte. - Amo... eres malo de verás... - digo haciendo un puchero.

-obviamente aquel momento no quedaría solo en el recuerdo imaginario saco su celular del pantalón y tomó una foto para su archivo personal, seguidamente volvió a atender el cuerpo del otro, de la manera mas perversa, baja sus pantalones , se posa sobre sus rodillas, y penetra hasta el fondo, entonces levantó la caderas del chico, y comenzo a embestir, sus dedos acariciaban totalmente sus pezones- nngnhhhhh -jadeando entre cada embestida, le seguía observando con una ceja arqueada y le susurra- Hmmm muy estrecho... casi virginal... -ríe-

Me preparo porque sé que va a penetrarme con fuerza y así ocurre. Sin poder hacer mucho, solo rodeo su cuerpo con mis piernas entrelazándolas y dejo que él haga el resto. Está duro y menudo tamaño, pienso mientras el placer sube por mi cuerpo con el suyo moviéndose dentro, además de que mis pezones empezaban a doler de todo lo que mi amo me había hecho.

- No es virgen, solo sé usarlo. - digo demostrándolo contrayéndome y haciendo que se apriete tanto que nos duela a los dos, pero le proporcione un gran placer a él.

La presión por el anillo subía, en verdad necesitaba correrme, pero no tiene piedad.

-sus embestidas se volvieron mas intensas, su modo de apretarle le daba mucho placer y le aumentaba el nivel de excitación, sus caderas seguían un ritmo bastante seductor, con fuerza pero a la vez muy sensual, era un encuentro rudo... pero aquello sería un gran recuerdo... para el mayor, y para el menor -

por eso los pets.. son los mejores -afirmó el mayor, mientras depositaba leves mordidas en el cuello del otro, entonces le preguntó- duele??... -agarró su pene acariciando de nuevo sus gemelos- dime cuanto deseas correrte... ?? -en ese instante sus caderas se afincaron mas fuertes en su culo-

Las embestidas se vuelven constantes y mis gemidos tambn. Mi boca está abierta por la escitación y quiere escaparseme un grito de la garganta, que consigue arrancarme con esa última embestida. - Amo... no lo soporto más... déjeme correrm, por favor. - digo diciendo de manera muy dulce las últimas palabras. Me agarro a los barrotes de la cama porque el ritmo es arrollador. - No me torture más, mi amo... yo... yo... de verdad, necesito correrme. No ve como estoy?Mi pene va a morir de placer. - jadeo agitadamente. - Podría correrme solo con ver como su polla me empala.

-se clavó mas hondamente en el, rozando su próstata estaba disfrutado al máximo verle sufrir de placer, entraba y salía de el con mucha fuerza, golpeando constantemente ese punto de placer tan erótico, escuchaba sus ruegos y termina por quitar el anillo, así mismo masturbó el pene del otro, pero en ningún instante paro sus caderas agresivas y sensuales

aghhhhhhh -sus gemidos invadían todo su ser y le dice- aun no acabaré quiero que me la chupes...

Apenas cogió mi pene y me vine y mucho. El grito de placer que salió de lo más hondo de mi garganta es puro erotismo, me quedo jadeando y él aún se mueve. - Sí, amo, quiero probarle y que joda mi boca. Quiero, parece delicioso.


Le miro sensual y me muerdo el labio cuando para. - Estoy completamente lleno. - digo algo cansado de todo lo que el hombre jugo conmigo.

-esbozó de nuevo una sonrisa malévola y lo desató de la cabecera de la cama, entonces besó apenas su cuello mientras lo hacía, luego se sentó a la orilla de la cama esperando que el otro comenzara su trabajo, mientras le observaba masturbaba su polla, de manera provocadora, el cuerpo del mayor se veía realmente seductor, sus músculos marcados, su mirada penetrante, el aroma de hombre expedía, era el de todo un semental-

Mis pupilas van hacia arriba, hacia mis manos atadas con la corbata a la cama. El mayor se da cuenta de su olvido y me desata. Me froto las muñecas mientras bajo de la cama y me pongo de rodillas ante él entre sus piernas. Presiono la punta del falo con un dedo. - Mmmm... lo has dejado preparado para mí... - era mi hora de jugar. Deslizo mi lengua por el interior de sus muslos antes de que con mis manos cubriéndolo bese la punta dando una pequeña succión.Después la mordisqueo y tras una lamida desde la base hasta el glande me lo meto en la boca. Es enorme, maldita sea. Lo chupo bien, ya que estoy más que acostubrado a ello. De vez en cuando lo libero para torturarle con pequeños círculos que hace mi lengua explorando su ranura. Los ruidos que hago con mi boca son excitantes. Una mano clava mis uñas en su pierna y yo sigo complaciéndole.

-separa sus piernas dejando espacio para que el otro se pose entre ellas, su abdomen plano y marcado por los músculos se contraía con cada inhalación, echa un poco su cabeza hacía atrás al sentir como presiona el glande, sonríe- Hmmm claro que si.... -responde ante su comentario, su falo estaba endurecido al máximo, sus gemidos un poco roncos pero sonoros invadieron aquellas habitación, su húmeda y cálida lengua estaba haciéndole sentir en el cielo- mmm ahhhh ahh

-su sexo palpitaba de placer y susurraba- nghh ah que... que rico la chupas -agarraba el cabello del otro para ver mejor el espectáculo que este le brindaba y se relamía los labios aun mas deseoso-

Este hombre es realmente sucio, mira que mirarme mientras se la chupo. Bueno, será mejor darle un buen espectáculo. Le miro desafiante antes de cerrar los ojos con fuerza y succionar realmente fuerte, casi hasta que le duela, pero sabiendo que vale la pena por el placer. Cuando noto que se va a venir me aparto y termino con la mano. Se viene salpicando todo mi rostro. Me relamo mirándole lascivamente y lamo lo que quedo en su miembro. - Sabía que estaría delicioso. - me limpio la cara con una sábana y me pongo de pie exhibiendo mi cuerpo antes de apoyar las manos en esos hombros anchos y fornidos y tumbarle de nuevo mientras beso sus poderosos labios.

-finalmente se corrió en su boca, aquello lucía muy apetecible, el cuerpo del chico estaba en todo su esplendor exhibiéndose de la manera mas lasciva y sensual que podía imaginarse, una vez q le tumba sobre la cama para besarlo le toma de las caderas apretándole un poco las nalgas, que de por si ya sabían que eran deliciosas, aquellos besos besos eran candentes llenos de lujuria, un momento que se separaron susurró- Un muy buen... pet... debería comprarte... -ríe de manera muy provocadora a decir verdad el hombre tenía un sexappeal muy fuerte-