Dia de escuela +libre+

Estaba colocando los papeles y demás documentos cuando escucha el comentario del gato y le mira enfadado esperando que fuera una broma, si lo era le reñiría pero si era verdad lo mataba.

- deja de decir bobadas... *miró al vampiro asomarse por la puerta* no... Asahi!! *le llamó a gritos para que volviera al aula, ahora estaban solos los dos de nuevo... eso le ponía nervioso* a mi no me mezcles con lo que te haya prometido ese crío... *no le miraba*

Miró al vampiro tomar una foto, pudo saber que sería el chico pelirrojo, el novio del gato a quien había visto en la foto, era uno de los alumnos del instituto, no podía permitir que lo hiciera, de modo que se las apañó para que la puerta desapareciera.

- no puedo dejarte morder a ese chico... Asahi se cabrearía y además es uno de los alumnos de este instituto *se acercó quitandole con violencia la foto, sin mirarle* si tienes que ajustar cuentas, hazlas con ese chico que acaba de irse... *dijo de espaldas a él*

Sintió como le tocaba y como lamía su cuello, se puso nervioso sin saber porqué, bajando sus manos a las del vampiro para separarla, aunque luego este se soltó solo. Se volteó mirándolo, parecía debil, eso no era normal en un vampiro tan experto como él.

- ¿no la encuentras? eso solo puede ser o porque yo soy muy buen demonio o porque tu estás débil... *le miraba* no te dejaré salir hasta que desistas en morder a uno de mis alumnos.

Se recuesta contra la pared sonriendo con malicia.
- sí, si que estás débil y no voy a dejarte ir... *le mira serio* si sales ahora podrías morder a un alumno, aguanta una hora y te dejaré marchar, entonces no habrá peligro de que muerdas a ninguno *se cruzó de brazos sin soltar la barrera, sino haciendola aún más fuerte*

Suspiró mirando por la ventana, empezaba a oscurecerse y el reloj le decía que en media hora el colegio estaria vacio, pero daría otros 30 minutos por si había algun rezagado.

Era hasta divertido ver al vampiro en aquella situación, le resultaba extraño y a la vez gracioso, pero temía que se desmayara, se veía muy débil, pero no podía dejarle ir sin más o atacaría con bestialidad a alguno de los alumnos.

Al ver como se removia mareado se acercó y le sujetó.
- si que estás débil *le mira muy cerca suyo* deberías haberte alimentado aunque a quienes vieras no fueran muy apetecibles... terminaras mal... *le reñia*

Se apartó al sentir el enfado del vampiro, realmente no quería que muriera, solo que no le llamara ocmo un cachorro ni le hiciera parecer un juguete al que solo le daba uso para el sexo... ¿le gustaba? eso no era posible... la lujuria no era amor... ¿los demonios podían amar? habia cosas que no sabía pero el vampiro estaba por caerse al suelo...

Llevó su mano a su cuello y se arañó dejando que slaiera sangre, no se opondría a que le mordiera. No dijo nada más.

Se acercó al vampiro, no tenía intención de curarse la herida. Le miraba muy de cerca, tanto que seguro podía oler su sangre sin dificultad. Cierto era que el tiempo corría, pero no le dejaría salir de la clase si no le mordía.

- muérdeme o no saldrás de aquí... *le mira serio* no dejaré que muerdas a nadie... muerdeme... *iba en serio, estaba seguro, quería que le mordiese, aún sin entenderse a sí mismo*

- deja de decir estupideces!! *le gritó cuando le vió caer al piso se agachó a su lado, realmente estaba mal* no estás bien... muérdeme!! ¿por qué ahora no quieres?

Se puso encima de él, rozando su cuerpo con el del vampiro, sin pretenderlo, acercándose a su rostro para que se lanzara a morderle.
- no te resistas y deja de ser imbécil... muerdeme ya!

Aquel vampiro se resistía, se negaba a beber de él... al final era cierto que había renunciado a él, ya ni siquiera quería su sangre... No era posible que dos criaturas malditas amasen... por mucho que el chico y angelos dijesen... eso no era posible...

Se puso en pie y cerró las ventanas para qu eno entraran los ultimos rayos de sol del día.
- está bien... espera solo un poco más... ahora te traigo a alguien... *hizo aparecer la puerta y fue a buscar a una de las chicas que trabajaban en la biblioteca, el unico lugar aún con gente, consiguió hipnotizarla y llevarla a la clase, cerrando la puerta* ahí tienes...

Se alejó dejando que la mujer se acercara al vampiro. Empezó a sanar sus heridas, sin mirar a esos dos.

De todas las mujeres que trabajaban en el colegio esa chica tambien era un dmeonio, de modo que no le preocupó verla muerta, lo único era que el director se enterara de lo que había pasado y le despidiera, pero le daba igual.

Sin mirarle se acercó al cadaver para hacerse cargo, haciendo que desapareciese con un chasquido de sus dedos, limpiando luego con un pañuelo alguna gota de sangre del suelo. Daba la espalda al vampiro, con el silencio supuso que se habría ido ya. Se levantó y se guardó los pañuelos en el bolso, no podía tirarlos allí o le descubrirían.

Le miró de reojo al escuchar su voz, aún seguía ahí.

- ya no hay nadie salvo nosotros en la escuela... *le miró yendo a su mesa para recoger las cosas* puedes salir a la ciudad y morder a quien quieras, no me pediste algo en concreto... *guardó todo en su maletín y se dirigió a la puerta* pensé que te gustaba mi sangre, por eso me ofrecí, nada mas... *le mira y abre la puerta* y ahora ya puedes largarte no camuflaré la puerta...

De pie abriendo la puerta le indicaba que podía irse.

No entendía a ese vampiro... era raro... Su maletín cae al suelo cuando le toma de la cintura.

- si tanto te gusta porqué no bebes? no hay quien te entienda... *le miraba pero sin separarse* por supuesto que te daría mi sangre... no tienes que morir por mi cabezonería... si mueres que sea luchando con otro vampiro o quien sabe como... *estaba nervioso al tenerle tan cerca* suficiente que he de cargar ya con la muerte de esa... *Se refería a la mujer que había matado Eru*

Aquel vampiro no le trataba con rudeza como hizo en veces anteriores, sino que le acariciaba y le trataba mejor... incluso el beso aunque fuera profundo, no se sintió mal.

- claro que puedes... *susurró sin moverse, dejándole que le mordiera, quería saber si realmente ese vampiro le resultaba tan importante y el motivo de ello* pero... déjame cerrar la puerta... ¿y si viene alguien de la limpieza? *trataba de alcanzar el pestillo, pues suponía lo que ocurriría tras morderle*